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La calificadora Moody’s consideró que una modernización exitosa del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) provocará un incremento en la
demanda de créditos bancarios y de inversión en México.
La perspectiva para el sistema bancario de México es estable, con base en sus expectativas de que los acreedores continuarán mostrando fundamentales sólidos y que los riesgos del entorno operativo están mermando, dijo en un nuevo reporte titulado “Perspectiva del sistema bancario-México”.
El documento destaca la buena calidad de activos del sistema bancario, al tiempo que muestra una fuerte rentabilidad y colchones de capital.
Según Moody´s, el Producto Interno Bruto (PIB) real de México crecerá 2.3 por ciento este año y 2.5 por ciento en 2019 comparado con el 2.0 por ciento en 2017.
El analista de Moody’s y coautor del reporte, Felipe Carvallo, dijo que “no está claro cómo es que el próximo gobierno (de López Obrador) podría cambiar la política económica, pero las dinámicas de crecimiento económico no cambiarán significativamente”, apuntó
La calificadora dijo que la calidad de activos se mantiene robusta, como lo evidencia una cartera vencida de apenas 2.2 por ciento a junio de 2018, a pesar del ligero incremento en el segmento de consumo.
Incluso un deterioro mayor de la cartera será manejable ante la creación de préstamos prudente y la buena cobertura de las reservas para pérdidas crediticias, mientras que la menor inflación reducirá los riesgos del crédito al consumo.
Expuso que aún en el eventual escenario de un fracaso en la renegociación del TLCAN, los bancos poseen exposiciones limitadas a industrias exportadoras que pudieran afectarlos de manera negativa. “Los bancos continuarán registrando una rentabilidad robusta y sólidos colchones de capital, lo cual los protegerá contra un deterioro en la calidad de activos”, consideró el analista de Moody’s y también coautor del reporte, Georges Hatcherian.
Además, añadió la agencia calificadora, las utilidades continuarán apoyadas por las altas tasas de otorgamiento y el acceso a depósitos de bajo costo, lo cual ayudará a los bancos a absorber sus elevados costos crediticios.