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El Grupo Parlamentario Nueva Alianza se congratuló por la aprobación ante el Pleno de la Cámara de Diputados, de un Acuerdo para salvaguardar los derechos humanos de los migrantes mexicanos afectados por la cancelación del Programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA), que podría dejar a miles de jóvenes en la incertidumbre ante el riesgo de ser deportados.



“Aplaudimos que el día de ayer la Junta de Coordinación Política (Jucopo), decidiera hacer suyo este Punto de Acuerdo y, con ello, demostrar que la Cámara de Diputados comparte nuestra preocupación por el bienestar de tantos jóvenes en vísperas de ser deportados”, destacó en Tribuna la legisladora Melissa Torres Sandoval.

La propuesta fue realizada el lunes ante la Jucopo por la Bancada Turquesa, así como retomada por todas las fuerzas políticas representadas en ese órgano, y tiene como principal objetivo proporcionar a los denominados dreamers, el apoyo y acompañamiento necesarios para hacer frente a “La era de Trump”.   

Torres Sandoval aseveró que esta medida impulsada por el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, “podría forzar un retorno masivo de miles de jóvenes que crecieron y se formaron como estadounidenses, y que hoy pueden ser expulsados de un país que consideraban su patria”.

“En Nueva Alianza estamos decididos a defender los derechos fundamentales de los jóvenes que se atrevieron a soñar con una vida mejor. Estamos convencidos de que se deben tomar las medidas necesarias para recibir a los jóvenes que se ven en la difícil situación de volver a un país no conocen”, expresó.

En el Punto de Acuerdo se exhorta a las autoridades federales a instrumentar acciones en materia de Derecho Internacional, a fin de proporcionar a los dreamers el apoyo y acompañamiento jurídicos respectivo, en aras de lograr que el gobierno del país vecino del norte cumpla con lo que desde su pasada administración, le ofreció a los jóvenes mexicanos mediante el DACA.

También se hace un llamado a los titulares de las Secretarías de Relaciones Exteriores (SRE), de Trabajo y Previsión Social (STPS) y de Economía (SE), para impulsar la incorporación de los dreamers a través de su contratación en empresas mexicanas que posean inversiones estadunidenses, y se les brinde la posibilidad de continuar sus estudios o profesión en México, en caso de ser deportados.

En caso de que los jóvenes sean expatriados, las dependencias antes mencionadas deberán implementar una estrategia para ubicarlos como trabajadores en alguna de las entidades de nuestro país o en regiones del mundo en las que exista inversión de empresas mexicanas.

Asimismo, deben realizar un análisis de las necesidades educativas de los jóvenes de origen mexicano que en la actualidad son beneficiados por el DACA, para que continúen sus estudios o el ejercicio de su profesión en territorio nacional, si es que son deportados.