web-24-breves-Laura Elena Herrejón

Además de la violencia político-electoral que ha dejado 292 víctimas entre 2006 y 2012, existe una relación clara entre municipios marginados, resultados electorales anormales y presencia de delitos electorales.

Tales son los datos que se aprecian en el “Primer Atlas de Riesgo Político-Electoral en México”, elaborado por varias organizaciones encabezadas por Movimiento Pro-Vecino, cuya presidenta, Laura Elena Herrejón, aseguró que se trata de un documento de carácter preventivo.

Durante la presentación del ejemplar en un centro cultural de la Colonia Roma, destacó que se trata de una herramienta fundamental para tomar acciones preventivas a fin de evitar que la violencia se desate en algunos puntos del país el 1 de julio próximo.

El estudio se elaboró con datos de instituciones como el INE, la FEPADE, Artículo 19 y la Asociación Nacional de Alcaldes, bajo la premisa de que no basta con ir a votar el día de los comicios para considerarse un ciudadano cumplido, sino que es necesario incidir positivamente.

En su oportunidad, la alcaldesa de Pachuca, Hidalgo, y presidenta de la Asociación Nacional de Alcaldes, Yolanda Tellería Beltrán, afirmó que la violencia política no es nueva, pero se ha desatado durante el último año.

Dijo que la violencia contra alcaldes, exalcaldes y candidatos se debe, entre otras cosas, a la falta de policías eficientes, capacitadas y equipadas en los municipios, y a pesar de ello, los presupuestos para apoyarlos van a la baja.

Por ejemplo, en 2017, el presupuesto del Fondo para el Fortalecimiento para la Seguridad Municipal (Fortaseg) bajó en 19 por ciento respecto al año anterior, y este año se mantuvo igual.

“Los municipios solos no podemos”, reconoció, por lo que exigió una coordinación con los niveles estatales y federal para resolver ese problema, en el entendido de que “el próximo presidente de la República no podrá ignorar estas cifras”.

En su oportunidad, el politólogo Boris González, encargado de elaborar el estudio, explicó que se analizaron tres aspectos: vulnerabilidad de los municipios (marginación); índices de votación fuera de la norma en relación con delitos electorales, y violencia (amenazas y homicidios).

Como resultado de ello, se obtuvo que hay 817 municipios de muy alta marginación y 283 de alta marginación, mayormente en Oaxaca, Puebla, Veracruz, Chiapas, Yucatán y Guerrero.

Después, se encontró una alta correlación entre alta vulnerabilidad y votaciones extraordinarias, sobre todo en Guerrero Oaxaca y Chiapas.

Sobre las votaciones extraordinarias, se analizaron las estadísticas históricas de 67 mil 583 secciones electorales desde el año 2000 a la fecha. Se encontraron 220 secciones electorales donde hubo más de 30 por ciento de votos nulos.

También se presentaron ocho ejemplos de casillas donde se recibieron votaciones de entre 155 y 463 por ciento de votantes, respecto al número de personas registradas en las listas nominales.

Y cientos de casillas con votaciones de entre 85 y 99 por ciento, así como muchas con más de 100 por ciento de votos, especialmente en Veracruz y Yucatán.

Respecto a la violencia, detalló que hasta el 8 de mayo se habían bajado de las campañas 270 candidatos, se habían producido amenazas y otros delitos que no ponen en riesgo la vida: 149 en la Ciudad de México, 101 en Veracruz, 94 en Oaxaca, 60 en Guerrero y 53 en Coahuila.

Respecto a los homicidios, presentó un cuadro con registro de 292 víctimas entre 2006 y 2018. De ellos, nueve eran alcaldes electos, 59 alcaldes en funciones, dos alcaldes con licencia, 25 candidatos y precandidatos, nueve dirigentes de partidos políticos y 41 periodistas.

También tres diputados, 47 funcionarios, un exdiputados, dos familiares, 25 líderes políticos y sociales y dos simpatizantes.

De todo ello, dijo, se elaboraron mapas que se pueden consultar en www.atlasriesgoelectoral.mx desagregados a nivel municipio y sección electoral y pronto estarán en versión interactiva, para consultar a detalle.