pena asi le fue-Xi Jinping

 

Medios de comunicación, autoridades religiosas y de la sociedad civil han criticado al presidente, Enrique Peña Nieto, por no recibir “públicamente” al Dalai Lama durante su visita a México, sin embargo el motivo “no es personal, sino más bien político, por lo que el gobierno chino ordenó al mexicano en no recibir al líder religioso.

Cabe recordar que Tendzin Gyatso o Dalai Lama fue exiliado de su país natal en el año de 1959 por el gobierno chino que ocho años antes había invadido el país budista, por lo que desde aquél entonces a viajado por todo el mundo impartiendo conferencias acerca de su religión.

Sin embargo, el gobierno chino ha declarado que el Tibet es una provincia del país asiático, por lo que instó a otros países del orbe que no reconozcan al Dalai Lama como un jefe de estado, es por ello que el gobierno mexicano aceptó el precepto con la finalidad de no dañar la relación bilateral.

En respuesta a las críticas, la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) informó que la visita del Dalai Lama a México es de carácter privado y como líder espiritual del budismo tibetano, afirmando que ningún funcionario del gobierno federal se reunirá con él.

Por medio de un comunicado, la cancillería reiteró que mantiene “su firme apego al principio de una sola China.

La SRE “reitera lo establecido en el párrafo 7 de la Declaración Conjunta entre los Estados Unidos Mexicanos y la República Popular China —suscrita el 4 de junio de 2013 durante la visita de Estado que realizó a nuestro país el Presidente Xi Jinping— en el cual se indica que México expresa su firme apego al principio de “una sola China”.

También, rectificó que la posición de que el Tibet forma parte inalienable del territorio chino y los asuntos tibetanos son asuntos internos de China, por lo que no puede considerar al Dalai Lama como un jefe de estado.

En el breve comunicado, reiteró también que “el gobierno de México tiene irrestricto respeto a todas las creencias y doctrinas filosóficas y religiosas, por lo que se comprometió a asegurar la seguridad del líder religioso.

VISITA DE XI JINPING Y COMPROMISOS NO PÚBLICOS

El pasado mes de junio el presidente de la República Popular de China, Xi Jinping realizó una visita de estado a México, por lo que fue recibido por Enrique Peña Nieto en la Residencia Oficial de los Pinos.

Según Presidencia de la República, los mandatarios expresaron el interés mutuo de consolidar la relación bilateral a través de diversos compromisos comerciales, como la exportación de carne de cerdo México- Asia o la participación de empresas chinas en la industria petrolera mexicana.

Cabe recordar que ante los medios de comunicación, los políticos firmaron la Declaración Conjunta entre China y México, en la cual se destaca el elevar el nivel de Asociación Estratégica a una Asociación Estratégica Integral.

Entre los compromisos se acordó el acceso a todas las categorías de tequila al mercado consumidor de China, Solución a los problemas de la industria textil y de vestido, Creación dentro de la Secretaría de Economía de una unidad especializada en asuntos de ambas naciones, conformación de un grupo de alto nivel empresarial y oferta de becas entre ambas naciones.

Sin embargo, fuentes de la dependencia afirmaron que el mandatario chino le pidió a Enrique Peña Nieto “no reconocer al Dalai Lama como líder religioso del Tibet”, aseverando que la región está en riesgo de perderse, por lo que pidió su apoyo a cambio de la apertura comercial.

El otro acuerdo, es la apertura del comercio “legal” entre China y México, favoreciendo centros de distribución como es el caso de la construcción del “Dragon Mart” en Cancún, Quintana Roo, que será el centro de distribución de productos chinos en todo el país, afectando severamente a la industria nacional.

¿Quién es el Dalai Lama?

Al morir se identificó a su sucesor en el niño Tendzin Gyatso, XIV y actual Dalai Lama nacido en una familia pobre de origen tibetano en la provincia china de Quinghai.

En 1950, cuando aún no había cumplido la mayoría de edad, los comunistas chinos invadieron el país; Tendzin Gyatso, declarado mayor de edad antes de tiempo, asumió el poder y se refugió cerca de la frontera con la India; pero, al no recibir ayuda exterior pese a su llamamiento a la India de Nehru y a las Naciones Unidas, hubo de aceptar la tutela comunista, firmando en 1951 un tratado que convertía al Tíbet en «provincia autónoma» de China.

Las relaciones con la China de Mao fueron muy conflictivas, luchando el Dalai Lama por preservar el sistema tradicional tibetano y los chinos por controlar el poder de hecho (designando por sí mismos a un joven chino como la reencarnación del Panchen Lama).

En 1956 estalló una primera rebelión antichina en dos provincias fronterizas de población tibetana, que fue reprimida de forma sangrienta. En 1959 un levantamiento popular apoyado por el ejército se enfrentó a las tropas chinas, que respondieron violentamente hasta la total ocupación del país.