Durante muchos años, los trabajadores mexicanos han tenido que enfrentarse a un sistema de pensiones desigual, cargado de dudas más que de certezas y que, en el mejor de los casos, les concedía una pensión promedio de apenas 30% del sueldo que percibían al momento de retirarse. Un verdadero insulto.
 
La Ley del 97, que dio pie al Sistema de Ahorro para el Retiro, resultó insuficiente. Dejó sumidos en la incertidumbre y desconocimiento a los trabajadores de las generaciones más jóvenes… hace 20 años, las Afores empezaron con 11 millones de cuentas. Hoy son casi 60 millones.
 
A los jóvenes no les alcanzaría la vida para obtener una pensión justa, los recursos de las Afores no son suficientes en el modelo de cuentas individuales.
 
Tras 18 meses de división, encono, críticas y acusaciones al parecer se da el primer paso a un   acuerdo que beneficia en serio a la clase trabajadora del país, con la iniciativa de reformas a la Ley del sistema de  pensiones  entre el sector empresarial, el sector laboral y  el gobierno de López Obrador, una alternativa, que promete elevar el monto de las pensiones en 40% en promedio, a partir de un aumento en las cuotas que aporta el sector patronal a las cuentas de los trabajadores.
 
Punto a analizar, el aumento a las pensiones lo pagarían los patrones ¿Estarán todos dispuestos y en capacidad de aguantar el compromiso? Ya lo veremos.
 
No podemos negar que la iniciativa es la mejor noticia, pone en el centro a los trabajadores, pero hace necesario atender la demanda de deducibilidad al 100% de las prestaciones laborales que está limitada hoy al 53% y que sin duda permitiría a los empresarios tener mayores ingresos para invertir y contratar a más trabajadores.
 
De otro modo se encarecerá el trabajo formal por la carga que pueda representar sostener el nuevo esquema de retiro para los patrones y se podría incentivar la informalidad, en medio de una grave crisis de desempleo.
 
El anuncio deja algunas dudas. Por ejemplo, si la edad de retiro seguirá siendo los 60 años, ¿Cómo entender la reducción de las semanas cotizadas de 25 a 15 años?  ¿Significa que los Millennial tendrán que sumar paulatinamente más semanas hasta alcanzar los 20 años de vida laboral?
 
No queda claro tampoco cómo se calculará el monto de las pensiones ¿seguirá siendo el saldo acumulado en la cuenta individual o dependerá del salario, o una combinación de ambos? 
 
Son temas que habrá que analizar en el marco de la discusión al interior del poder legislativo, si no queremos caer en nuevos escenarios de indefinición e incertidumbre.
 
Lo importante es que hoy los lazos comunicantes se restauran entre empresarios y gobierno.
 
Hoy no se destruyó, se construyó sobre lo ya existente y en el sentido correcto
 
Así debe ser, por México siempre
@ramirezpaco