Como se esperaba el presidente, Enrique Peña Nieto no aguantó la tentación de tener en sus manos y besar la Copa del Mundo, Brasil 2014, por lo que el trofeo internacional visitó la Residencia Oficial de los Pinos para que sus habitantes pudieran conocerla de cerca.
Siendo uno de los primeros de los 89 mandatarios que tendrán el honor de cargar el símbolo del futbol mundial, el ejecutivo federal expresó su confianza de que el torneo que comenzará el próximo verano sea “el mejor que ha tenido México y que la copa regrese al país”, explicó.
En compañía del jefe de Gobierno del DF, Miguel Ángel Mancera, autoridades educativas, deportivas y culturales le deseo a Brasil “el mayor de los éxitos para que la justa deportiva se celebre con cabalidad”, reconociendo a los deportistas de la nación.
Con un gesto de preocupación aceptó que cada “cuatro años los mexicanos esperamos la llegada del evento deportivo que logra convocar un ambiente de convivencia en todo el mundo.”, explicó.
En tanto recordando el mundial México 76 , Enrique Peña Nieto recalcó que la selección nacional de México tiene la oportunidad de lograr el campeonato, afirmando que “ México tiene una gran confianza en su selección”, demostrando ante el mundo que el país está cambiando.
“Somos un país con un gran potencial en el ámbito deportivo y otros”, replicó.
Enfatizó que en los últimos meses el país ha tenido diversos cambios, mismos que permitirán que México se convierta en lo que ha deseado, por lo que le exigió a la Selección Mexicana regresar con la Copa del Mundo. “La confianza de un pueblo pone en la selección que demuestre nuestro gran desempeño”, indicó.