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A la Real Sociedad de Carlos Vela simplemente le alcanzó para caer dignamente en la Semifinal y así serán Barcelona y Real Madrid quienes disputen la Final de la Copa el Rey el próximo 19 de abril.

El equipo gallego empató 1-1 en Anoeta, donde si bien su portero los salvó en varias ocasiones, también

hicieron lo necesario para que el resultado pareciera justo.

De esta manera, fue la derrota de 2-0 la semana pasada en el Camp Nou el que definió la serie a favor de los “Blaugrana”, que se encontrarán con su acérrimo rival “Merengue”, el cual dejó en el camino al Atlético de Madrid.

El duelo en San Sebastián siempre tuvo al visitante como claro dominador y la mitad de terreno local como zona en la que se disputó la mayor parte de las acciones.

Casi a la media hora de juego, al minuto 27’, Lionel Messi aprovechó uno de los pocos errores atrás de los “Vascos” para sentenciar la Semifinal con el 1-0 que en el global lucía mucho más abultado.

José Ángel no controló una pelota en medio campo y desde ahí el argentino se enfiló para rematar con un disparo entre cinco defensas y que el portero Zubikarai alcanzó a tocar pero no lo suficiente para desviar.

Vela nuevamente destacó como el más desequilibrante de los “Txuri-Urdin” y fue en el segundo tiempo cuando estuvo a centímetros de marcar un golazo, ya que prendió el balón de media vuelta, con poco ángulo de disparo, que terminó en el travesaño.

Pero antes, después del gol “Culé”, el mexicano estuvo cerca de ser expulsado, ya que en un par de minutos recibió la primera amonestación y cometió una falta sobre Sergio Busquets que pudo ameritar la segunda.

Sin embargo, Vela se mantuvo en el terreno de juego y poco después, al 35’, también estuvo cerca al recibir en el área chica un centro profundo que le quedó largo en el control y permitió la reacción del arquero José Manuel Pinto.

Zubikarai fue factor por los remates que le tapó a Pedro, Messi y Cesc, así como un mano a mano que le ganó a Dani Alves al 76’.

Como por justicia divina, la Real puso el 1-1 al 86’ con un remate de volea del francés Antoine Griezmann luego de un centro por izquierda del “Chori” Castro.

La afición local reconoció el esfuerzo del equipo gallego y los despidió entre ovaciones, al tiempo que el Barça comenzaba a imaginar un duelo ante el Real Madrid que, a falta de confirmación, se disputará en el Estadio valenciano de Mestalla.