Las hermanas musulmanas Khadija, Sugra y Zohra Dawood y sus hijos, de entre tres y 15 años de edad, todos de Bradford, en el norte de Inglaterra, fueron dadas por desaparecidas hace seis días, cuando tenía previsto llegar desde Turquía.
Las tres mujeres, de entre 30 y 34 años, viajaron a Arabia Saudita en peregrinación y luego se embarcaron en un vuelo directo a Estambul, el 9 de junio, según un responsable de seguridad turco.
Sus esposos y familia ha expresado su preocupación después de que no regresaron a Reino Unido el 11 de junio como estaba previsto, por lo que la policía británica contactó con su homóloga turca para pedir ayuda al día siguiente.
“No tenemos ni idea de si están en Turquía o ya han cruzado a Siria. Estamos trabajando para encontrarles pero no hay rastro de ellos hasta ahora”, explicó el responsable, citado por el diario turco Hürriyet.
Los teléfonos móviles de las hermanas no funcionan y tampoco han actualizado sus perfiles en las redes sociales
La hipótesis más probable es que hayan llegado a tener contacto con su hermano, de quien se dice que está luchando para las filas de EI.
La Policía del condado de West Yorkshire (norte de Inglaterra), que está en contacto con las autoridades turcas para tratar de dar con su paradero, indicó este miércoles que una de las madres británicas ha establecido contacto con su familia en Reino Unido.
En un comunicado, la policía explicó que una de las tres hermanas se ha puesto en contacto y “hay indicios de que el grupo podría haber cruzado ya la frontera siria”, aunque esto “no está corroborado”.
“Hemos sido informados de que se ha establecido un contacto con la familia en Reino Unido que indica que al menos uno de los adultos del grupo estaría en Siria”, agregó.
Las autoridades británicas estiman que más de 700 británicos han viajado a Siria, a través de la frontera turca, para sumarse a las filas del EI.
Turquía ha rechazado las críticas de algunos países occidentales por no detener el flujo, con el argumento de que las agencias de inteligencia nacionales deben hacer más para detener a sus nacionales que se han radicalizado.