El gobierno egipcio condenó el ataque ocurrido la mañana de este sábado en pleno corazón de la capital El Cairo y aseguró que Egipto “está en guerra” y determinado a continuar sus esfuerzos para combatir y erradicar el terrorismo.

La explosión, que destruyó buena parte del edificio que alberga al consulado italiano, fue reivindicada por militantes del EI a través de un mensaje en la red social Twitter, en el cual advirtieron además a los musulmanes que se mantengan alejados de sitios occidentales.

“Soldados del Estado Islámico en El Cairo detonaron un vehículo cargado con 450 kilogramos de explosivos en la sede del consulado italiano. Recomendamos a los musulmanes alejarse de estas guaridas porque son blancos legítimos para los mujaidines”, señaló el grupo.

El primer ministro egipcio Ibrahim Mahlab, quien inspeccionó el sitio de la explosión acompañado por su ministro del Interior, Magdy Abdel Ghaffar, afirmó que su país “está en guerra” y que “el mundo debe unirse contra el terrorismo”.

Fuentes hospitalarias informaron por la tarde que el estallido causó la muerte de un policía y heridas a nueve civiles egipcios, entre ellos cuatro niños, cuyas edades van de siete a 13 años, de acuerdo con reportes del periódico local The Cairo Post.

El ministro egipcio de Relaciones Exteriores, Sameh Shoukry, se comunicó vía telefónica con su colega italiano, Paolo Gentiloni, a quien aseguró que Egipto es capaz de “erradicar el terrorismo”.

Afirmó que el gobierno egipcio intensificará sus esfuerzos con los países del mundo, entre ellos Italia, para desarraigar el terrorismo, “Egipto está determinado a frustrar complots dirigidos contra su estabilidad y eliminar a todas los organizaciones terroristas”, dijo.

Tras condenar el ataque y ofrecer sus condolencias a los familiares de las víctimas, Gentiloni expresó el apoyo de Italia a Egipto contra el terrorismo y señaló que su país no se ha intimidado por el ataque, informó la cancillería egipcia en un comunicado.

Las autoridades judiciales emprendieron una investigación para identificar a los responsables, por lo que revisarán las grabaciones de las cámaras de vigilancia del consulado.

Después de la explosión, decenas de personas se congregaron en el lugar y pidieron la muerte de los miembros de la Hermandad Musulmana y del expresidente islamista Mohamed Morsi, según The Cairo Post.