A apenas dos semanas del inicio de los Juegos Olímpicos de invierno en Sochi, el Kremlin multiplica las acciones contra células islamistas que amenazan la seguridad de la cita deportiva. Pero, varios terroristas podrían encontrarse ya en Sochi. La policía busca activamente a tres viudas negras, mujeres de activistas caídos en combate en el Caúcaso Norte.

A una de ellas, Ruzana Ibragimova, se la habría visto en las últimas horas en las calles de la estación balnearia. Se teme que las tres mujeres hayan penetrado el llamado “anillo de acero”, el perímetro vigilado por 40.000 efectivos para garantizar la seguridad de los juegos. Vladimir Putin aseguró ayer a Barack Obama que la situación está bajo control.