La Junta Internacional de Fiscalización de Estupefacientes (JIFE) lamenta, en un comunicado emitido en Viena, la aprobación de esa ley por parte de un país que ha suscrito las convenciones internacionales sobre drogas, y asegura que no se ha tenido en cuenta el impacto negativo de la legalización en la sociedad.

Raymond Yans, presidente de la JIFE, expresa en la nota su "sorpresa" al conocer que "un Gobierno que es un socio activo en la cooperación internacional y en el mantenimiento del Estado de derecho internacional, haya decidido conscientemente romper las disposiciones legales universalmente acordadas".