Por regiones, el organismo mantiene la progresión en los dos próximos años en Estados Unidos en torno al tres por ciento como motor de las economías avanzadas. En el caso de la eurozona, se revisa al alza en una décima hasta el 1,2 y el uno y medio. En la segunda economía del mundo, China, el crecimiento debe descender del siete y medio por ciento en 2015.

Los países emergentes son los que presentan actualmente las mayores incógnitas, según el organismo de Washington, a pesar de que siguen contribuyendo en dos tercera partes al crecimiento mundial. El FMI teme que continúen las salidas masivas de capital, como ocurrió en primavera y más recientemente en enero, tras el inicio de la retirada progresiva por parte de la Reserva Federal estadounidense de sus inyecciones de dinero. Por otra parte, se alerta de la aversión al riesgo por parte de los inversores si se recrudece la crisis ruso-ucraniana.

Y, sobre la eurozona, se advierte de la fragilidad que continúa en el sector bancario y el bajo nivel de inflación que puede encarecer la deuda y frenar la actividad. En España, se revisa al alza el crecimiento al 0,9 y al uno por ciento respectivamente en 2014 y 2015.