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Con la aplicación del IVA en alimentos y medicinas, 14 millones de mexicanos habrían caído de manera inmediata en la pobreza extrema, reconoció, la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol), Rosario Robles Berlanga, al asegurar que la reforma hacendaria no golpea a los clases más desprotegidas.

La funcionaria defendió así, la reforma hacendaria propuesta por el Presidente Enrique Peña Nieto y dijo: “Se habla de que la reforma hacendaria golpea a la clase media. Les quiero decir que el no haber puesto un IVA en alimentos y medicinas, protege a las clases medias de este país. No solo protege a los pobres, que dedican sus ingresos a alimentación y medicinas. Protege a 14 millones de clases medias vulnerables, que de haber habido un IVA a alimentos y medicina, como algunos han sugerido, hubieran caído inmediatamente en las filas de la pobreza”.

Reconoció, sin embargo que las actuales tasas de crecimiento del país no son suficientes para que la mitad de los mexicanos tengan un ingreso digno, y afirmó que para abatir la pobreza y desigualdad en México, debe incrementarse la tasa de crecimiento económico mediante la aprobación de reformas estructurales, como la hacendaria.

Durante su comparecencia ante diputados como parte de la glosa del primer informe de gobierno, reveló que la pobreza en México no ha disminuido en los últimos 30 años, pese al incremento de los recursos para programas sociales, por lo que la nueva estrategia debe basarse en el crecimiento económico del país.

En su comparecencia que duro poco más de tres horas, la funcionaria explico que el país tiene que hacer los cambios y reformas que le permitan sentar las bases de un mejor crecimiento y una mejor distribución de la riqueza.

Robles Berlanga indicó que el acceso a la salud, educación, vivienda y alimentación no son concebidos ya como prebendas, sino como derechos constitucionales.

Sostuvo que este nuevo enfoque permitirá avanzar de la protección social universal a la seguridad social universal para todos los mexicanos, independientemente de la condición formal o informal de su empleo.

La nueva estrategia, dijo, está sustentada en tres premisas: La primera, es que no es posible abatir la desigualdad y la pobreza sin crecimiento económico, empleo y generación de riqueza que se pueda distribuir de manera equitativa. En segundo lugar, un rediseño de los programas sociales para trascender desde la visión asistencialista a incorporar la visión productiva. El tercer es desarrollar la política social construyéndola “desde abajo”, es decir, desde la coordinación con estados y municipios.

Robles Berlanga comentó que la Cruzada Nacional contra el Hambre, se ha desarrollado este año hacia una población objetivo de siete millones de mexicanos, considerados en pobreza extrema alimentaria.

Robles Berlanga compareció ante comisiones de Desarrollo Social, de Asuntos Indígenas y de Igualdad de Género, donde dijo que en los 400 municipios donde se ha destinado el programa, se ha actuado de manera responsable, y en ninguno de ellos ha existido una petición de carácter político para ser beneficiario y “los presidentes municipales y gobernadores han avalado el trabajo”.

En la actualidad, dijo, los programas sociales son complementarios, no excluyentes, y puso como ejemplo que los beneficiarios de Oportunidades pueden ahora acceder a otros programas, como son el subsidio de Diconsa y Liconsa.

“Hemos trabajado y rediseñado estas dos grandes empresas sociales, Diconsa y Liconsa son las grandes redes de abasto social que tiene el país, sobre todo en momentos de emergencia en las comunidades más alejadas”, indicó.

La secretaria de Desarrollo Social, Rosario Robles Berlanga, reconoció que en el primer semestre del 2013 existieron subejercicios en la aplicación de programas sociales, pero aclaró que se debió a la veda de 45 días por los comicios en 14 entidades del país.

“Por decisión de los partidos políticos del Pacto por México, en 14 entidades del país, durante 45 días, los pobres dejaron de recibir todo programa socia. Evidentemente si hacemos un análisis a julio, hay un subejercicio, la mitad del país tenía la ventanilla cerrada”, dijo durante su comparecencia.

Al responder los cuestionamientos de diputados, la funcionaria federal indicó que la Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas (CDI) tiene en este momento una cifra de ejecución del gasto del 93 por ciento.

Precisó que la Cruzada Nacional contra el Hambre considera 212 municipios indígenas dentro de los 400 donde se ha aplicado el programa este año.

DIPUTADOS CUESTIONAN A ROBLES

Durante su comparecencia, Rosario Robles fue cuestionada por la presidenta de la Comisión de Igualdad de Género, Martha Lucía Mícher Camarena (PRD), quien señaló que, en los últimos 20 años, la pobreza por ingreso sólo ha disminuido sólo 0.8 puntos porcentuales, al pasar del 53.1 al 52.3 por ciento de la población total.

Asimismo, interrogó a la funcionaria sobre la forma en que el gobierno asegurará el acceso efectivo y la calidad de la educación, de la salud y de los servicios básicos a toda la población y cómo incorporará el enfoque de género en el tema de la disminución de la pobreza.

También, consideró que el programa de Seguro de Vida para Jefas de familia, a cargo de la Sedesol, “es electorero para conquistar o consolidar clientelas políticas” ya que sólo atiende al 20.7 por ciento de la población objetivo y sus beneficios se asignan discrecionalmente.

Mícher Camarena indicó que, de acuerdo a la Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos de los Hogares (ENIGH) existen 8.2 millones de mujeres con las características requeridas para este programa.

Comentó que el 50 por ciento de las madres solas en México se encuentran en situación de pobreza multidimensional y un 20 por ciento en pobreza extrema, según el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval).