Resulta terrible lo que está pasando en el país. Terrible tener un gobernante 

 

predicador que a pregunta expresa sobre las disposiciones a implementar para combatir el feminicidio conteste que “nos falta fraternidad”. Terrible que un secretario de seguridad ciudadana como Omar Garcia, ante el fracaso de detener la ola de violencia en la CDMX asegure se atiende el caso de la niña Fatima por “instrucciones claras de la jefa de gobierno” como si este burócrata no cumpliera con sus responsabilidades y tareas legales sino hasta que su jefa lo instruya. Terrible tener al frente del gobierno capitalino a una activista de izquierda vinculada al caso del señor de las ligas que luego de décadas de entorpecer a otros gobiernos y partidos, hoy tenga tan lastimada a ésta ciudad y destaque como una de las más contaminadas y violentas del país. Terrible que no funcionaran las alertas y operativos que pudieron haber salvado la vida de Fatima. Terrible que nos muestren hoy la firmeza y prontitud con que se intenta resolver el caso en lugar de prevenirlo y evitarlo. Terrible que intenten culpar a la madre de provocar el secuestro porque “llegó tarde a la escuela por la niña”. Terrible que hagan creer que los familiares presentaban debilidad mental y afectaciones físicas. Terrible que AMLO le levante la mano a Claudia y asegure que no está sola luego del plagio de un joven, Norberto Ronquillo. Terrible que hace apenas unos días se fugaran tres peligrosos reos ligados a el Chapo, no se de agilidad para su re aprehensión como en el caso mediático de Fatima y que el presidente pida respeto para los crimínales. Terrible observar a los familiares, como los de Fatima, acusar a las autoridades de omisas, negligentes e irresponsables y ni ninguna de ellas renuncie siquiera por dignidad o verguenza. Terrible que el mundo se entere cómo seres despiadados matan a una niña después de las atrocidades que cometieron con ella y no daré detalles que hoy se conocen porque no lo merecen ni los familiares ni la pequeñita. Terrible que como sociedad toleremos lo que está ocurriendo, que le sigamos el juego al Ejecutivo con sus mañaneras, que continúe en el cargo el sr Durazo después de los fiascos como el culiacanazo, que pasemos inadvertido el destrozo económico que se está generando, que soportemos la bofetada de casos como el de Bartlett o Napito, que seamos testigos como personajes como Marti Batres justifique lo ocurrido a Fatima porque así sucedió en Ciudad Juárez y como su patrón culpen al “neoliberalismo”, por admitir la imposición de la hermana de un guerrillero y secuestrador en la CNDH cuya vida y la de su madre ha sido comerciar con la imagen de Jesús y defender los derechos de encapuchados, por registrar como células de profesionales dañan la ciudad, cometen atracos y atacan a la UNAM, aguantar que los niños con enfermedad terminal se queden sin medicamentos, que nos engañe el presidente haciéndose pasar como un pasajero convencional de líneas aéreas mientras sus colaboradores y familiares se transportan en Jets de la Fuerza Aérea o en aeronaves privadas, por dejar que Mexico se preste a recibir a hampones y tiranos haciendo el ridículo internacional por rogarle acepte asilo. Terrible todo esto como el cierre de suministros de gasolina no para combatir al huchicoleo sino para cancelar contratos con Estados Unidos y buscar los acuerdos con Maduro en Venezuela y después de todo fracasar. Terrible que se use a los pobres como bandera electoral y de codicia. Terrible como se está hundiendo Mexico y ahí vamos todos los mexicanos hoy radicalizados desde el poder hasta por una rifa que no es rifa. ¡Que terrible, en verdad, que terrible!