eclipse

En un fenómeno que no se volverá a repetir hasta el 2033 la Luna alcanzará su punto más cercano a la Tierra y, al mismo tiempo, quedará detrás del planeta. Este lo ocultará por completo y solo dejará pasar hacia el los rayos de sol de

color rojo, con lo cual le "teñirá" su superficie por unos minutos. El espectáculo celeste podrá apreciarse a simple vista desde toda América Latina.

Cuando la Luna gira alrededor de la Tierra dibuja una elipse, no un círculo, por lo cual en ciertos momentos se encuentra más cerca del planeta y en otros momentos está más lejos.

Este aspecto del recorrido del satélite en torno a la Tierra no atrae demasiada atención, y no suele ir más allá de las clases de Astronomía o los cálculos y estudios de quienes se dedican a las Ciencias que analizan el firmamento.

Sin embargo, este domingo (27 de septiembre), cuando la Luna se acerque a su punto más cercano a la Tierra sucederá otro fenómeno al mismo tiempo: un eclipse.

El resultado será una Luna de mayor tamaño que el de costumbre (por estar más cerca) y con un color que solo adquiere en el momento máximo del eclipse. Rojo. Será una "Luna de Sangre", como se llama al satélite cuando ambos fenómenos coinciden.

Las dos situaciones no se volverán a dar juntas hasta dentro de 17 años, según la NASA. De hecho en los últimos 15 años solo coincidieron cinco veces.

Otro de los atractivos que tiene este suceso astronómico es que se verá con total nitidez desde toda América del Sur, la cara de la Tierra que quedará oculta a la luz del sol.

El evento comenzará a las 21:11 del domingo y tendrá el momento de máximo esplendor a las 23:40 o 23:45 aproximadamente. Finalizará sobre las 2 de la madrugada. Así lo estimó Santiago Roland, coordinador de actividades del Observatorio Astronómico Los Molinos.

A las 23:40 o 23:45 "es el momento en que la Luna va a estar más adentro del cono de sombra de la Tierra y va a estar más rojiza", indicó el especialista en diálogo con El País.

Por qué roja.

Durante los eclipses de Luna la alineación entre los tres cuerpos celestes es la siguiente: Sol- Tierra y Luna.

Esta secuencia esconde el por qué de que el satélite se tiña de color rojo. Cuando la Tierra "tapa" al sol algunos rayos pasan a su alrededor. Según explicó Roland, la atmósfera de la Tierra dispersa los colores azules y verdes y deja pasar los rojos.

"Si la Tierra no tuviera atmósfera la sombra sería perfectamente oscura. Pero como la Tierra tiene atmósfera y deja pasar algunos rayos de luz y no otros, (la sombra) queda rojiza", indicó Roland.

Es un elemento muy sutil de todo el fenómeno, comentó el especialista, "pero hace toda la diferencia porque la Luna se ve roja". Este aspecto ha generado cientos de leyendas y creencias populares que van desde los aztecas hasta las interpretaciones del Apocalipsis.

En referencia al tamaño y al hecho de que el satélite se encuentre en su punto más cercano, los astrónomos advierten que el efecto será poco llamativo a simple vista. Sí será distinguible en imágenes de telescopios pero al ojo humano aparecerá un 8% más grande que el tamaño de todos los días. Eso sí, quedará roja.

La lotería del Sistema Solar


La Luna tiene un momento de mayor acercamiento a la Tierra que se llama "perigeo" y un momento más lejano que es el "apogeo", explicó Santiago Roland, coordinador del Observatorio Astronómico Los Molinos. Algunas veces, el perigeo (el momento más cercano) coincide con la fase llena de la Luna, entonces se la llama Súper Luna. Y algunas veces, muy pocas, en ese momento se da un eclipse: la Luna queda detrás de la Tierra y esta tapa los rayos del sol y la tiñe de rojo. Esta vez todo se dará en el mismo día: Luna llena, eclipse y Súper Luna. "Es todo en uno, la Lotería", subrayó Roland.