Homenaje Carlos Funtes

*Encontró la novedad de la capital, dice Emilio Pacheco

A poco más de un año de su partida, Carlos Fuentes fue homenajeado en un acto solemne la noche del lunes en El Colegio Nacional, el escritor José Emilio Pacheco refirió unas palabras acerca de la importancia del legado cultural que dejó Fuentes no sólo en nuestro país, sino a nivel mundial, ya que borró el estigma de ser escritor mexicano.

En compañía de Enrique Krauze, director El Colegio Nacional, José Emilio Pacheco lector, compañero y amigo de Carlos Fuentes, habló de la riqueza cultural encontrada en las letras del autor de Aura, “Fuentes encontró la novedad de la capital. Para quienes nacimos y crecimos aquí no tenía ningún atractivo la avenida San Juan de Letrán, Insurgentes, el Zócalo o Chapultepec. La región más transparente nos familiarizó ese paisaje urbano que dábamos por conocido y nos mostró su riqueza, su complejidad y ante todo su misterio”.

El escritor falleció en la Ciudad de México el 15 de mayo del 2012, motivo por el cual Pacheco lo recordó a un año de su partida, “hace un año la obra de Carlos Fuentes inició un camino ya independizado de su autor, nada nos consuela de su ausencia pero tenemos la certeza de que cada vez estará más vivo en su inmensa obra”.

José Emilio Pacheco lo recordó como una persona preparada, modesta y generosa, “en lo que a mí concierne sólo puedo decir innumerables muestras de su interminable generosidad”, agregó que era “dueño de una brillantez verbal suprema en dos o tres idiomas, Fuentes pareció desde un principio un personaje ideal para las aulas, los salones de conferencias y los estudios de televisión”.

Carlos Fuentes ingresó a El Colegio Nacional el 17 de octubre de 1972, siendo recibido por Octavio Paz con un discurso hasta la fecha recordado, “La literatura universal sólo tiene dos temas, uno es el diálogo del hombre con el mundo, el otro es el diálogo de los hombres con los hombres. La pregunta de Fuentes se abre, se cierra y se vuelve abrir. En el ámbito del segundo tema, en verdad más que una pregunta es el cuerpo a acuerpo con la realidad, a veces un combate y otras un abrazo erótico, por eso las dos notas de su obra son el erotismo y la política”.