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La Feria del Libro de Leipzig continuó hoy con una enorme afluencia de visitantes, una señal de optimismo en el sector editorial alemán, en el que vuelve a destacar un protagonista: el audiolibro.

El éxito del audiolibro es algo más inusual en otros países, pero una auténtica realidad en Alemania. El éxito de este producto, que no depende sólo de los escritores que lo escriben, sino de los actores que lo leen, queda patente en las cifras:

“En 2013 hemos registrado un récord de ventas de audiolibros con 14.1 millones de unidades”, señaló Simone Mühlhauser, portavoz del círculo de editoriales de audiolibro de la Asociación de Libreros Alemanes.

La ventas del sector aumentaron 3.6 por ciento frente al año anterior.

“2013 fue un año de éxitos en el audiolibro”, señaló también Sabrina Kreuz, gerente de una editorial especializada de Múnich del grupo Random Hause que publica numerosos bestseller en formato de audio.

La variante en audio se publica con cada vez más frecuencia al mismo tiempo que el libro y ya no se espera a ver si el libro en papel es un éxito para sacar la versión de audio.

El audiolibro más vendido han sido los de la serie Harry Potter, apuntó, Kreuz, al tiempo que señaló que los audiolibros son un artículo de regalo cada vez más frecuente.

Apenas cabía un alfiler este domingo en las salas de la ciudad del este de Alemania, durante la jornada que suele acoger la máxima afluencia de público.

La cita editorial alemana, que abre sus puertas hasta este domingo, anunció el viernes un aumento de visitantes en los primeros días de la feria, que sumaron 68 mil y que superaron a los del año anterior.

La gran afluencia fue recibida con mucho optimismo por las editoriales, que hablaron de un ambiente de entusiasmo por el libro y por la lectura, pues la presencia fue también masiva al festival de lectura “Leipzig Lee” que se celebra de forma paralela, en el que participan unos tres mil escritores en 410 lugares de la ciudad.

Y es que dedicado a ese público la feria de Leipzig presentó este año por primera vez una sección propia: la convención del comic Manga, ampliando la superficie de exposición de 69 mil a 85 mil 500 metros cuadrados.