Especialistas en salud pública y nutrición alertaron sobre el grave problema de obesidad que existe en el país, que afecta a siete de cada 10 adultos y a uno de cada

tres niños, por lo que urgieron al gobierno federal a tomar las medidas urgentes para combatirlo.
En el foro ‘Por una política integral para el combate a la obesidad’, explicaron que se han tenido reuniones con las autoridades de la Secretaría de Salud, ya que el costo del problema ha ido aumentando hasta alcanzar un gasto de casi 100 mil millones de pesos.
Advirtieron que de no tomar medidas, la sociedad pagará en siguientes tres décadas montos exorbitantes difíciles de alcanzar.
En este marco, Juan Rivera Dommarco, director del Centro de Investigación en Nutrición y Salud del Instituto Nacional de Salud Pública y coordinador del estudio Obesidad en México: recomendaciones para una política de Estado, informó que se han entregado a la Secretaría de Salud estas sugerencias.
Urgió a implementar una estrategia nacional y multisectorial que combata este problema, y explicó que enfrentar la obesidad requiere de involucrar a los distintos niveles de gobierno, así como de los poderes Ejecutivo y Legislativo.
Ello, con el objetivo de que se incida sobre las fallas del mercado para reducir el impacto de la obesidad en la salud de la población mexicana y se aborden los determinantes de la obesidad en los diferentes contextos en los que interactúan.
Entre las recomendaciones presentadas está incluir a la política nacional de prevención de la obesidad como parte del programa nacional de desarrollo y otorgarle suficiente presupuesto para la implementación de las acciones y evaluación de las mismas.
Además de lograr el establecimiento de metas, plazos y acciones para el cumplimiento de los objetivos del Acuerdo Nacional por la Salud Alimentaria por parte del sector privado, los gobiernos estatales y municipales, así como identificar mecanismos y procesos para su seguimiento y para la rendición de cuentas.
Asimismo, incluye reformar la ley general de salud, la ley general del trabajo y otras leyes y reglamentos para dotar al Estado de los instrumentos legales para la aplicación de regulaciones y disposiciones para prevención de obesidad.
Otras recomendaciones son promover las implementación de un sistema de etiquetado frontal de alimentos que sea único, simple, con un solo sello, fácil de entender y establecido de manera independiente de la industria de alimentos por un comité independiente de expertos que revise la experiencia internacional al respecto.
También generar acuerdos entre la Secretaría de Educación Pública y las autoridades municipales o delegacionales para que en un amplio perímetro del entorno escolar se limiten los alimentos que se restringen al interior de las escuelas, entre muchas otras propuestas.
El especialista dijo que la Secretaría de Salud federal, Mercedes Juan López, se mostró sensible al problema, ‘está muy preocupada por el problema de la obesidad y nos dijo que una de sus acciones prioritarias es la prevención de enfermedades crónicas, me parece buena señal’.
A su vez, el director del Poder del Consumidor, Alejandro Calvillo, dijo que el documento presentado debe considerarse como el libro blanco de la obesidad, ya que cuenta con el aval de las máximas instituciones académicas del país.