Atlixco, 24 de mayo 2023—La contingencia que ha provocado la actividad del volcán Popocatépetl, en el

centro de México, ha sido como un segundo golpe, tras la pandemia de la covid-19, para comercios y negocios en el estado mexicano de Puebla, uno de los afectados por la caída de ceniza junto con Morelos y Estado de México.

Desde hace una semana, el volcán aumentó su actividad y debido a ello los comerciantes del municipio de Atlixco, en el estado de Puebla, señalaron este miércoles que durante estos días viven un especie de segunda pandemia ante el poco movimiento que viven en la localidad.

En un recorrido llevado a cabo por EFE los comerciante, sobre todo de alimentos, coincidieron en que las ventas han caído entre un 50 y un 70 % ya que a los negocios "entran muy pocos clientes" y en 5 a 6 horas que tienen el negocio abierto apenas si entran los clientes.

La actividad del volcán también ha ocasionado que negocios de la región coloquen una especie de cortina plástica transparente para proteger sus productos de la caída de ceniza, para que de esa manera los consumidores sientan confianza en adquirir algún alimento o producto como ropa, artesanías o algún artículo básico.

-NEGOCIOS VACÍOS-

En el recorrido, EFE pudo constatar que la gente que transita por las calles de Atlixco en su mayoría son habitantes del lugar y pocos turistas, quienes van cubiertos de la cabeza, además van cubiertos de la mayor parte del cuerpo, aunque ambos, locales y visitantes, caminan desconfiados.

Lucero Márquez, propietaria de una cafetería compartió que sus ventas han bajado un 70 % desde el domingo que se presentó la caída de ceniza más fuerte, desde que entró en actividad del coloso, y agregó que sus ventas ya venían a la baja desde hace tres semanas, pero ahora la situación ya es insostenible.

"La primera batalla y la más grande es contra la ceniza, porque con cualquier ráfaga de viento todo se llena de ceniza y hay que estar limpiando constantemente y la otra y más grande como negocio son las bajas ventas, nos sentimos otra vez como si estuviéramos en pandemia".

Refirió que la gente no está saliendo de sus casas y por los tanto no consume. "Sea mañana, tarde o noche las calles están desiertas y mejor ya cerramos porque sabemos que ya no entrarán clientes".

En el caso de Josue Ramírez, dueño de un negocio de postres y bebidas preparadas, compartió que sus ventas han bajado por lo menos un 50 % en fines de semana, mientras que de lunes a viernes prácticamente no tiene ningún cliente, esto debido a que el consumo de sus productos en mesas al aire libre y ahora la gente está buscando espacios donde refugiarse.

"Los negocios pequeños que dependemos solo de las mesas que tenemos fuera de nuestros locales, no tenemos ventas, por las afectaciones que provoca la ceniza. Hay restaurantes que tienen montados sus espacios afuera pero realmente atienden a sus clientes adentro, a todos nos ha afectado demasiado", indicó.

-TURISTAS SIN INFORMACIÓN-

Antonio Villa, turista originario de la ciudad de Guadalajara, estado de Jalisco, compartió que sus vacaciones se han visto arruinadas ante la caída de ceniza, ya que arribaron al municipio de Atlixco el fin de semana y el domingo que cayó la mayor cantidad de ceniza no pudieron salir ni tener actividades.

Además, dijo "tenemos miedo ya qué hay poca información sobre qué hacer en caso de emergencia" y donde se hospedan han preguntado a los responsables pero saben los protocolos a seguir.

"Nos preocupa el hecho de que vaya a hacer erupción el volcán y tengamos que regresar porque no sabemos cómo actuar en una situación de estas, porque no hay información clara", señaló.

El martes, el Ejército mexicano cumplió una jornada de labores para intentar mitigar la principal afectación que es la caía de ceniza volcánica y de esa manera auxiliar a la población de las comunidades aledañas al volcán Popocatépetl.

Una de las más afectadas ha sido la comunidad de Santiago Xalinzintla, en el municipio de San Nicolás de los Ranchos, el más cercano al activo coloso, a tan solo 12 kilómetros.

Durante la última semana, el volcán ha expulsado material incandescente, vapor y ceniza, la cual ha llegado a los municipios del estados de Puebla, Hidalgo y Estado de México, centro del país.

Las autoridades mexicanas analizan a diario la actividad del Popocatépetl desde que en 1994 se inició su actual fase eruptiva.