La inconsciencia de algunos funcionarios de la Secretaría del Medio Ambiente del Distrito Federal (SMADF), y de la Delegación Magdalena Contreras, son los responsables que el Río Magdalena, el último vivo del Distrito Federal, siga gravemente contaminado en los 20 kilómetros de recorrido metropolitano.
Son 3,520.6 hectáreas de extensión de la cuenca del Río Magdalena y 14.8 kilómetros del río se ubican en suelo de conservación.
Los trabajos están abandonados y sin plan de seguimiento. Anualmente se desperdician 20 millones de metros cúbicos de agua suficiente para abastecer toda la delegación, pero termina en los drenajes por que las autoridades ambientales y las del Sistema de Aguas de la Ciudad de México del DF relegaron el proyecto.
Tan sólo elaborar el Plan Maestro de Rescate del Río Magdalena y del Río Eslava costo de cuatro millones de pesos.
El Plan detendría el crecimiento de asentamientos irregulares, mismos que aumentaron, pasando de 500 a 600 y supuestamente encauzaría las aguas residuales en drenajes paralelos para no contaminar el Río, labor que se interrumpió, pues las autoridades ambientales dicen que no hay presupuesto para ello.
Samuel Rodríguez Torres, dirigente del Partido Verde del Distrito Federal condenó la ineficiencia en el rescate del cauce. Hasta ahora sólo se hicieron labores de desazolve y recordemos que los errores en materia ambiental, van en detrimento de la vida sustentable del DF y nos afectan a todos por igual.
Señaló que proteger al Medio Ambiente es una decisión valiente que afecta a grupos políticos o empresas, pero sólo así se fincará un sólido futuro a la vida de todos capitalinos.