Dado que el Distrito Federal está ubicado geográficamente en una zona altamente sísmica, es de fundamental importancia implementar todos los mecanismos de prevención posibles para evitar el mayor número de afectados ante la posibilidad de que se llegara a presentar un temblor de graves dimensiones.

 Así lo declaró el diputado del  PRD, Asamblea Legislatura del Distrito Federal (ALDF), Alejandro Ojeda, quien adelantó que para el presupuesto del 2014 en el Distrito Federal planteará una partida específica para que el Sistema de Alarma Sísmica  se extienda hacia a lo largo y ancho de la Ciudad de México.

 Agregó que a pesar de que la mayoría de los edificios públicos locales y federales, así como otro tanto de hospitales y escuelas ya cuentan con este valioso instrumento, hace falta que la Alarma Sísmica se extienda a zonas habitacionales de toda la ciudad.

 Opinó que deben instalarse sistemas de alerta temprana en zonas estratégicas y densamente pobladas, lo que sin duda servirá para salvar un mayor número de vidas, en caso de que se presentar un terremoto de las dimensiones de septiembre de 1985.

 Miembro de la Comisión de Protección Civil de la ALDF, el diputado Ojeda dijo que de acuerdo a los especialistas las alarmas sísmicas ofrecen de un minuto y hasta un minuto y medio de tiempo, antes de que se manifieste el movimiento telúrico, lo que da oportunidad a la población de salir de sus casas o el lugar donde se encuentran y ponerse a salvo.

 Sobre el monto del presupuesto que se requeriría, el legislador perredista adelantó que acudirá al Sistema de Alarma Sísmica (SAS), que opera en la Ciudad de México para establecer el presupuesto que se requeriría y los alcances que pudiera tener esta propuesta.

 “Lo importante –apuntó— es que estamos en tiempo y forma para ir realizando conjuntamente con el Gobierno del Distrito Federal, así como instituciones académicas y especializadas los análisis correspondientes para concretar este proyecto”.

 De igual forma, mencionó que el actual sistema de alarma símica opera únicamente para detectar los movimientos telúricos que tienen su epicentro en Guerrero, por lo que haría falta analizar la probabilidad de implementar este instrumento de detección temprana hacia Oaxaca u otras latitudes de la República Mexicana.