aproducto

Dicen que la escuela quitando ignorante, pero lo pendejo no. Y no es que tenga yo ganas de decirle así a alguien en especial, pero después de ver la forma en que resultamos campeones del fútbol mas ratonero del mundo, o

séase de la Confederación de Naciones de Norteamérica, Centro América y el Caribe, donde habitan las naciones más tercermundistas del tercer mundo que presuntamente son lideradas por la primer potencia del mundo pero que en fútbol es de las peores potencias, me dan retortijones en el estomago y vaguidos en la mayor parte del cuerpo por la puritita vergüenza de la forma en que fuimos finalistas, y después campeones. Se necesita mucha caradura, desvergüenza y cinismo para aceptar simplemente que salimos campeones del acto de corrupción mas grande de la historia patria.

Y no es que tenga yo algo en contra de quienes fueron seleccionados para integrar la selección de fútbol más ratonera del mundo, porque al fin y al cabo esa es nuestra lamentable realidad y quienes se tuvieron que someter a los designios de quienes les pagan y les dicen lo que tienen que hacer. Porque eso es lo que son nuestros futbolistas, esclavos de quienes les pagan porque al fin y al cabo de ellos dependen y ganan muy buen dinero, pero lo único que no les podemos perdonar a esos méndigos dirigentes del fútbol es que a cambio de todo el dinero que reciben todavía tienen que pisotear el honor no tan solo de esos esclavos que contratan, sino el de millones de hombres y mujeres que piensan que el fútbol es el deporte nacional, sin detenerse a pensar que solamente son manipulados y que el honor nacional es acabar con esa maldita pobreza que tiene metidos en muchos problemas a más de la mitad de nuestros hermanos y hermanas.

Por eso me hierve el buche, me ronca el pecho, me jeringa la conciencia que esa bola de sátrapas que se dicen empresarios y que han hecho del fútbol un motivo más de vergüenza del orgullo nacional sigan adelante con su pinche negocio aprovechando la adición que muchos hombres y mujeres sienten por eso que todavía llaman deporte. Claro esta que quienes tenemos un poco de inteligencia en la sesera nos damos cuenta de lo que significa el hecho de que más de veinte hombre vestidos de mamarrachos con calzoncillos cortos se dediquen a andar corriendo detrás de una pelota.

Pero dejando de lado a esos hombrecillos que lo único que desarrollan son músculos porque cerebro tienen muy poco ya que no les da para entender la trampa en que los metieron, lo único que puedo decir es que esos empresarios desvergonzados siguen manipulando conciencias y ganando dinero a raudales engañando al pueblo que piensa que la selección es la que representa el honor nacional. Que quede claro, lo único que tenemos de honor nacional es lo poco que queda de esa patria a la que hemos permitido que el dinero haga jirones para mantener a más de la mitad en pobreza porque mientras sigan siendo pobres seguirán siendo negocio. Pobre patria con tanto mendigo empresario que engañan a esos pobres calzonudos petrimetres que usan para engañar a los demás. He dicho. Vale. This email address is being protected from spambots. You need JavaScript enabled to view it.