Los Angeles.- El regreso de Steve Kerr a mitad de temporada con los Golden State Warriors y el despido abrupto de David Blatt como entrenador de los Cleveland Cavaliers, ha creado un gran enigma en torno a quienes dirigirán el próximo Juego de Estrellas de la NBA.
Según las reglas, los entrenadores de los equipos líderes en cada Conferencia hasta el 31 de enero, son los que dirigen las escuadras del Este y el Oeste en el partido anual entre entre los mejores jugadores de la liga.
El denominado "All Stars Games" se llevará a cabo este año en Toronto, el 14 de febrero, justo a mitad de temporada.
Los Cavaliers lideran la división del Este con récord de 30 victorias y 12 derrotas, pero sorprendentemente despidieron el viernes sin previo aviso a su entrenador David Blatt, quien les llevó a las finales del pasado año.
Si todavía están delante el próximo domingo, es probable que el recién ascendido a entrenador en jefe, Tyronn Lue, reciba el visto bueno de la liga para dirigir a las Estrellas, aunque el exjugador ha afirmado que sería "bueno" si ese honor recayera en el ahora desempleado Blatt .
"Estoy abierto a hacerlo porque creo que el resto de nuestro equipo se lo merece", dijo Lue.
"Todos hemos hecho un trabajo duro y todos hemos ayudado al entrenador Blatt en todo lo que podía porque era nuestro líder. Pero si no lo dejan (dirigir el All Stars), creo que se lo merece nuestro cuerpo técnico y debe ser capaz de hacerlo", subrayó Lue.
Otro rompecabezas se presenta en la Conferencia Oeste también, donde el entrenador principal de los Golden State Warriors, Steve Kerr, regresó al servicio por primera vez en la temporada el viernes.
Eso significa que el entrenador interino Luke Walton estuvo al frente de los Warriors desde el arranque de la temporada, guiándolos a un récord de 40 victorias contra 4 derrotas (40-4).
Según informes, la liga está considerando si Walton podría ser invitado a dirigir la Conferencia Oeste.
Kerr está vetado porque ya dirigió el del pasado año, y según las reglas, un mismo entrenador no puede trabajar en dos años seguidos.
"Estamos revisando nuestras reglas alrededor de la situación del entrenador del Oeste para determinar lo que es apropiado", dijo el viernes el vocero de la NBA Tim Frank.
Normalmente, si un entrenador dirige un año en un All Stars Game y al siguiente su equipo lidera hasta la mitad de campeonato, el trabajo pasa entonces al técnico del equipo que marche en segundo lugar en la respectiva Conferencia, en este caso, a Gregg Popovich, de los San Antonio Spurs.
"La única razón por la que regresé (de la operación en la espalda) es para hacer que 'Pop' tenga que trabajar en el Juego de Estrellas en vez de estar en una playa con un Mai Tai en la mano", bromeó Kerr.