Después de varias decisiones arbitrales polémicas en la reciente Copa de Oro, el presidente de la Concacaf anunció que se encargará de evaluar la Comisión de Arbitraje del organismo.
El análisis evaluará las normas del arbitraje y el proceso para decidir los nombramientos de árbitros para cada partido, informó el organismo en un comunicado.
"La base de nuestro deporte es el juego limpio, y tenemos que realizar las medidas necesarias para reforzar la importancia de este principio", dijo Alfredo Hawitt, quien asumió la presidencia de la Concacaf en mayo después que Jeffrey Webb fue acusado y arrestado por corrupción.
Webb y su predecesor en la presidencia, Jack Warner, fueron acusados por las autoridades estadounidenses por crimen organizado, sobornos y lavado de dinero.
Panamá y Costa Rica pidieron a la Concacaf que investigara a la comisión de arbitraje después de verse perjudicados por decisiones de los árbitros en sus respectivos partidos contra México por las semifinales y cuartos de final de la Copa de Oro.
México superó a 1-0 Costa Rica en cuartos de final gracias a un penal en el último segundo de los tiempos extra, y luego venció 2-1 a Panamá en semifinales con dos penales, el primero a los 88 minutos por una dudosa mano.
El presidente de la federación panameña, Pedro Chaluja, incluso dijo que el partido contra México fue amañado, mientras que los jugadores de la selección canalera posaron con una pancarta con el mensaje "CONCACAF LADRORES. CORRUPTOS".
Al día siguiente, la Concacaf señaló que el árbitro Mark Geiger admitió haberse equivocado en el partido entre México y Panamá.