El número uno del mundo consiguió tres de los cuatro títulos de Grand Slam (el Abierto de Australia, el de Wimbledon y el de Estados Unidos) y se ha asegurado que acabará el año como número uno en el ránking de la ATP.
La próxima cita del tenista tendrá lugar del 15 al 22 de noviembre en las finales del World Tour en Londres, a las que llega con gran confianza, después de haber ganado sus últimos 22 partidos.
"Obviamente estoy muy orgulloso y contento de ganar de nuevo este título, es un gran torneo y los mejores jugadores del mundo han estado aquí", dijo Djokovic en la cancha.
Djokovic, el primer tenista que acumula cuatro victorias en Bercy y también el único que ha ganado tres veces consecutivas el Roland Garrós, estuvo muy superior frente a un débil Murray.
El escocés tuvo problemas para encontrar su juego desde el principio del partido, enviando un par de tiros largos, pero Djokovic rompió el servicio con un juego en blanco para el 2-1.
Murray mejoró su juego en el segundo set aunque perdió el saque al inicio. Subió a la red para el 2-2 y en el sexto juego se las arregló para conseguir un 30-0 durante el servicio de Djokovic.
Eso fue lo más cerca que estuvo de molestar al serbio, que en el siguiente juego rompió el servicio para el 4-3, después de que a Murray se le fuera de largo un golpe de derecha.
Djokovic consiguió una rápida victoria en París, acumulando su sexto título Másters 1.000 de esta temporada, tras coronarse en Indina Wells, Miami y Monte Carlos, y también se llevó la victoria en Roma y Shangai.
En cambio, se le escaparon los títulos de Cincuenta y Montreal, donde lo derrotó Murray, y no participó en el Másters 1.000 de Madrid.