La estadounidense Serena Williams ganó por tercer año consecutivo el Abierto de Estados Unidos al derrotar este domingo a la danesa Caroline Wozniacki por 6-3, 6-3 en Flushing Meadows, Nueva York.
Serena Williams, de 32 años, necesitó sólo de 75 minutos para alcanzar su sexta corona del US Open y decimoctava de Gran Slam, que consiguió sin perder un set en este torneo.
Amigas cercanas fuera de la cancha y rivales enconadas red por medio, Serena le ha ganado nueve de los 10 partidos a Wozniacki, quien, como premio de consuelo, consigue el regreso al 'Top 10' de la WTA, tras haber salido de la lista élite después del Abierto de Australia.
Wozniacki se quedó con ganas de sacarse la espina de semifinales del US Open de 2011, cuando Serena le ganó en otros dos aplastantes sets (6-2, 6-4).
La 18ª corona de Gran Slam que consiguió Serena el domingo la coloca en el cuarto escalón junto a sus compatriotas Martina Navratilova y Chris Evert, de una lista de las máximas ganadoras de torneos Majors que encabeza la australiana Margaret Court, con 24 títulos.
"Es un placer para mí ganar mi primer Gran Slam (de 2014) aquí y el número 18", dijo Williams, con la voz quebrada. "No podría pedir haberlo hecho en lugar mejor.
"Enhorabuena a Caroline, ella sabe las luchas que he tenido. Ella es una buena persona, una gran amiga. Estamos pasándonos mensajes de texto todo el tiempo. Ella va a ganar un título de Gran Slam en breve", expresó Serena, que destruyó a su amiga con 29 tiros ganadores.
Williams levantó el trofeo en Flushing Meadows por tercer año consecutivo, uniéndose a Evert como la única mujer en la era de los Abiertos en ganar tres títulos consecutivos.
Dio la impresión de que Serena Williams no puso el pie en el acelerador desde principio ante su amiga Wozniacki. Sólo después que la danesa la presionara un poco más en los finales del segundo cuadro, la norteamericana le puso todo el vapor a su caldera para terminar su obra destructora.
Aunque consiguió el primer quiebre del partido en el tercer game, luego se regaló ella misma al cometer la primera de sus tres doble faltas del partido, alimentando las esperanzas de una Wozniacki que se acercó 3-2 en la pizarra.