En los videos de propaganda del EI en Libia, Siria e Irak, se ven a menudo combatientes armados que circulan en modelos pick up del grupo japonés.
"Apoyamos la investigación del Departamento del Tesoro estadounidense, que abarca, desde una perspectiva más amplia, los canales de abastecimiento internacionales y los flujos de capitales y mercancías en Oriente Medio", afirmó la empresa en un comunicado.
"Toyota tiene una política estricta que consiste en no vender vehículos a compradores que podrían utilizarlos o modificarlos para actividades paramilitares o terroristas", explicó la empresa.
"Hemos establecido procedimientos (...) con el fin de impedir que nuestros productos sean utilizados para un uso militar no autorizado. (Pero) para un constructor es imposible controlar las filiales indirectas o ilegales", dijo el fabricante, que vendió el año pasado más de 820 mil vehículos en Oriente Medio.
Los pick up de Toyota, de Mitsubishi Motors, Isuzu o Hyundai, suelen ser muy apreciados por ejércitos y grupos rebeldes de todo el mundo, por su resistencia.