Imágenes difundidas por la televisión francesa y en redes sociales muestran un número indeterminado de cuerpos sobre el asfalto de una avenida, así como al camión blanco con el frente abollado y decenas de agentes y elementos de emergencia.
Asimismo, mostraron al camión de carga con el frente abollado y a personal de emergencia auxiliando a varias personas, algunas de ellas muy heridas.
Las víctimas participaban en los festejos por el aniversario de la Toma de la Bastilla, celebrada en Francia cada 14 de julio con magnos desfiles y actos cívicos.
Informes policiales indican que el conductor fue abatido. Se desconoce hasta el momento la identidad del conductor, de los fallecidos y de los heridos, así como los motivos del atropellamiento.
De acuerdo con fuentes policiales, el camión habría estado repleto de armas pesadas. Hasta ahora ningún grupo terrorista se ha adjudicado el ataque.
"Había armas en este vehículo y armas pesadas. No puedo decir mucho más, ya que es responsabilidad del prefecto y del fiscal", declaró a la prensa Estrosi, quien indicó además en Twitter que el último balance "ascendió a 77 muertos".
La unidad antiterrorista de Francia participa en las investigaciones.
Esta masacre ocurrió ocho meses después de los atentados de París en los cuales suicidas del grupo yihadista Estado Islámico (EI) mataron a 130 personas en varios ataques coordinados.
Tras el ataque, fuerzas militares y grupos especiales de la policía cerraron el área.
El presidente François Hollande, del país, quien estaba fuera de París, regresó a la capital para enfrentar la crisis. Apenas horas antes, Hollande había anunciado que el estado de emergencia decretado en el país europeo luego de los atentados de París de noviembre del año pasado terminaría definitivamente el próximo 26 de julio.
Este es el segundo ataque más sangriento cometido en Europa en los últimos años, superado sólo por el atentado múltiple en París de noviembre 2015 que dejó un saldo de 130 muertos, y decenas de heridos.
Francia ya había sido golpeada por la violencia en los atentados del 7, 8 y 9 de enero de 2015, contra la revista satírica Charlie Hebdo y contra un supermercado kósher, que dejaron 17 muertos y a los que siguieron varios otros ataques y tentativas.