Hasta ahora, 582 compañías han expresado interés en la construcción del muro fronterizo con México, una de las promesas estrella con las que alcanzó el poder el presidente, Donald Trump.
En un portal dirigido a las empresas que quieren hacer negocios con el Gobierno, el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) y la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) expresaron su agradecimiento a las "muchas expresiones de interés recibidas".
Debido a ese gran interés, en otra breve notificación del 3 de marzo, el Gobierno adelantó que las compañías deben presentar proyectos que incluyan muros de 9,14 metros de alto que cumplan con "requisitos de estética, antiescalada y resistencia a la manipulación o daños".
El 24 de febrero, el Ejecutivo de Trump informó por primera vez del proceso de licitación del muro.
En febrero, el Gobierno de Estados Unidos también anunció que quiere empezar la construcción del muro en los enclaves fronterizos clave de El Paso (Texas), Tucson (Arizona) y El Centro (California).
Estos enclaves hacen frontera con las ciudades mexicanas de Ciudad Juárez (Chihuahua), Nogales (Sonora) y Mexicali (Baja California), respectivamente.
El muro en la frontera fue una de las promesas electorales más populares de Trump, quien ha asegurado que el costo de la obra lo asumirá México, cuyo Gobierno se niega rotundamente, aunque el Congreso de EE.UU. adelante el dinero.
El costo estimado del muro fronterizo ha ido creciendo progresivamente desde los alrededor de 8.000 millones de dólares que calculó inicialmente Trump, hasta los 21.600 millones, según los últimos cálculos del Departamento de Seguridad Nacional.