Pese a las bajas temperaturas cercanas a cero, los uniformados de diferentes secciones de las Fuerzas Armadas de Rusia conmemoraron ese hecho trascendental para la Segunda Guerra Mundial.
La parada militar por el Día de la Victoria incluyó 114 unidades del equipamiento de combate "lideradas por el legendario tanque T-34-85", reportó la agencia rusa de noticias Sputnik.
Fueron incluidos en el desfile varios modelos de misiles y vehículos militares, así como parte de la aviación rusa, cuya participación tuvo que reducirse debido a las condiciones meteorológicas adversas.
De acuerdo con Sputnik, las temperaturas se mantuvieron entre 2.0 y 3.0 grados centígrados, "las más frías registradas para un 9 de mayo en toda la historia de posguerra".
En el marco de la celebración, el presidente ruso Vladímir Putin resaltó que en caso de haber triunfado los nazis en aquella guerra que culminó en 1945, habría estado en peligro la existencia del propio país.
"Si hubiéramos perdido, como sucedió con numerosos países europeos, habríamos tenido un destino completamente diferente al de los países esclavizados de la Europa de aquel entonces", aseguró.
La guerra comenzó en septiembre de 1939 con la ocupación alemana de Polonia y se extendió por Europa, pero los nazis invadieron la entonces Unión Soviética hasta 1941 en una conflagración mundial que dejó más de 50 millones de muertos, entre ellos más de 20 millones de soviéticos.
"Se habría tratado no solo de la (amenaza a la) existencia de nuestro país, sino de nuestro pueblo como etnia", expresó Putin durante la cena oficial en Kremlin con motivo del Día de la Victoria.