Voceros del Departamento de Justicia Criminal de Texas (TDCJ) confirmaron que el reo recibirá una inyección letal el próximo día 14 de noviembre.
De consumarse la ejecución, Moreno Ramos será el mexicano número 12 en someterse a la pena capital en Estados Unidos, desde la reactivación de esta condena en 1976.
La ejecución sería días después del primer aniversario de la de Rubén Ramírez Cárdenas, uno de los diez mexicanos que han recibido la inyección letal en Texas.
Sólo un mexicano, Mario Murphy, fue ejecutado por una entidad diferente a Texas, al recibir la inyección letal en Virginia en 1997.
En mayo de 2017 la Suprema Corte de Justicia de Estados Unidos rechazó la revisión de la última apelación interpuesta por Moreno Ramos sin emitir comentario alguno.
Los abogados defensores del mexicano acudieron a la Suprema Corte para buscar un nuevo proceso para su cliente y argumentaron que en su detención y juicio fueron violados sus derechos como extranjero al no haber recibido la asesoría y ayuda legal del gobierno de su país, garantizado bajo el tratado internacional de la Convención de Viena de 1963.
Moreno Ramos es originario de la comunidad de El Ciruelo, en el municipio de Pinotepa Nacional, en el estado de Oaxaca, y fue sentenciado a la pena de muerte en marzo de 1993.
Un jurado de una corte del condado de Hidalgo, en el sur de Texas, lo declaró culpable de la muerte con golpes de martillo de su esposa Leticia Ramos, de 42 años, su hija Abigail, de siete, y su hijo Jonathan, de tres.