Una hora después el editor recibió la noticia de que Ahmed había sido alcanzado por una bala de un francotirador en la frente mientras grababa a los soldados disparando desde lo alto en los edificios.
Abu Zeid aseguró que su colega había captado la escena de la represión egipcia desde el principio y que su cámara será la prueba de las violaciones de derechos que se cometieron aquel día en el cual murieron 53 personas.
El 3 de julio, un golpe de Estado militar acabó con la presidencia de Mohamed Mursi y abrió una nueva etapa dentro de la ajetreada transición democrática que encara Egipto tras la caída de Hosni Mubarak, en febrero de 2011.