Además, la tormenta ocasionó cortes de luz que afectaron a 48.000 hogares en la región que rodea a Tokio, más de la mitad de las cuales, unas 26.000 sigue sin electricidad, según Tokyo Electric Power (TEPCO).
Según la cadena pública NHK, la nieve y el hielo fueron aparentemente responsables de varios accidentes de tráfico ocurridos en las prefecturas de Ishikawa, Nagano o Aichi que se saldaron en total con 10 fallecidos.
Caos en el transporte
Además de provocar unos mil 200 heridos, según datos de la Agencia Nacional de Policía, la tormenta motivó que ayer por la tarde las dos mayores compañías aéreas niponas, Japan Airlines (JAL) y All Nippon Airways (ANA), suspendieran sus vuelos domésticos desde el aeropuerto tokiota de Haneda, dejando a 98 mil personas en tierra.
En el otro aeropuerto de la capital, Narita, unas 8 mil 200 personas tuvieron que pernoctar al cancelarse los servicios de ferrocarril y autobús por el cierre de varias carreteras circundantes.
Debido a los fuertes vientos, en ambos aeropuertos se cancelaron hoy otros 250 vuelos, la mayoría domésticos.
Unos 290 mil pasajeros se vieron a su vez afectados por los retrasos que la ventisca provocó en las líneas de tren bala Tokaido y Sanyo, que unen Tokio con la franja occidental del la isla de Honshu, la mayor de Japón.
Algunos tramos de las autopistas que cubren recorridos paralelos a estas líneas de tren de alta velocidad permanecen aún cerrados.
El frente se ha desplazado ahora a la región noreste de Honshu, donde la Agencia Meteorológica ha decretado la alerta por la nieve y el viento. En esa zona se han registrado también cortes de luz en prefecturas como Miyagi y Fukushima.
La agencia mantiene aún la alerta en la región capitalina por las fuertes rachas de viento. La nevada también ha afectado aparentemente a las elecciones para gobernador de Tokio que se celebraban hoy y que han contado con una participación de solo el 34 %.