Los ataques “se produjeron indiscriminadamente”, según testigos presenciales, y los fallecidos en el metro fueron una mujer de 47 años llamada Fan Pi-chu y los varones Hsieh Ching-yun, de 28 años, y Chang Cheng-han, de 26 años, mientras que otra mujer de 62 años, Lee Tsui-yun, murió después de ser trasladada a un hospital, según fuentes policiales y hospitalarias.
El presunto autor de los ataques es un estudiante de 21 años de la Universidad de Tunghai, de la ciudad central de Taichung, que compró dos cuchillos y se montó en el metro en la estación del templo turístico de Longshan, señaló hoy a la prensa el comisario jefe del Nuevo Taipei, Chen Kuo-an.
“Desde que era estudiante de secundaria tenía planes de hacer algo como lo que ha hecho hoy”, dijo Chen, quien confirmó que el sospechoso había colocado en la red un mensaje diciendo que hoy iba a “realizar cosas grandes”.
En los interrogatorios, el estudiante dijo no tener remordimiento alguno por sus actos, según fuentes policiales citadas hoy por el diario Taiwan News.
Testigos presenciales aseguran que el sospechoso comenzó a atacar con un cuchillo de 20 centímetros a los pasajeros después de cerrarse las puertas en la estación de Longshan, y que fue de vagón en vagón hasta que el metro llegó a la siguiente estación, Jiangzicui.
En el vagón en el que estuvo antes de bajarse del metro en Jiangzicui, los pasajeros le hicieron frente con gritos y blandiendo paraguas y no se produjo allí ninguna agresión, según un vídeo mostrado por la cadena de televisión TVBS.
En la estación donde se bajó, el estudiante siguió amenazando a los usuarios del servicio público, que huían y le tiraban objetos, hasta que la policía lo detuvo, según muestran las cámaras del metro.
Las víctimas del ataque no se explicaban por qué el agresor había comenzado a asestar puñaladas indiscriminadamente y gritaron en petición de ayuda.
“Fue algo horrible y no sabemos por qué nos atacaba”, dijo uno de los heridos al salir del vagón del metro, donde había sangre por el suelo y mochilas y otros objetos desparramados.
El estudiante llegó a Tunghai procedente de otra universidad, donde había tenido problemas por mal rendimiento escolar, y las autoridades de esa universidad querían hablar con él porque había subido comentarios sospechosos en internet.
El alcalde de Taipei, Hau Lung-bin, aseguró que recientemente se había aumentado la presencia policial en el metro y que se estudian ahora medidas para asegurar que este tipo de sucesos no se repitan.
Después del incidente, cuyas causas aún se investigan, se interrumpió el tráfico de convoyes en una de las vías de la línea de metro afectada, lo que ha producido numerosos retrasos.