Más de 1.400 personas habían sido atendidas ya el viernes y diez fallecieron, según la misma fuente.
Tal como sucedió la víspera, la temperatura sobrepasó los 35 grados a la sombra en numerosas regiones de Japón y el termómetro marcó en algunos lugares 39º.
Esta ola de calor, bastante habitual en la temporada, se ha acentuado en los últimos días. Más de 700 personas debieron ser atendidas el jueves y varios centenares en los días precedentes.
En la mitad de los casos, se trata de personas de edad (más de 65 años), una categoría que corresponde a un cuarto de la población de Japón.