“La escalada de violencia en Gaza, sobre todo en las últimas 48 horas, ha sido intensa y la situación se asemeja mucho a la de los primeros días de la ofensiva de noviembre de 2012”, advirtió UNRWA en un comunicado.
Recordó que la relativa calma vivida en la zona durante 2013 “se han hecho añicos desde el secuestro y asesinato de tres adolescentes israelíes en Cisjordania el 12 de junio y después del asesinato de un adolescente palestino de Shu’fat el 2 de julio”.
De acuerdo al ministerio palestino de Salud, 24 civiles murieron y al menos se cuentan más de 180 heridos, sin embargo otras fuentes reportaron al menos 48 muertos, entre ellos mujeres y niños.
Según UNRWA, durante las últimas 24 horas se han registrado unos 232 ataques aéreos israelíes y otros incendios que han afectado la franja de Gaza, mientras que algunos 169 cohetes y proyectiles han sido disparados contra Israel desde Gaza.
Por el momento, “no hay indicios de que se pueda frenar la violencia en los próximos días”, observó.
Los continuos bombardeos dirigidos en Gaza, incluyendo el asesinato de civiles perpetrado por las fuerzas de Israel, “apuntan al despliegue de una crisis más prolongada”, valoró.
Durante la noche y el día de hoy las calles de Gaza están prácticamente vacías y casi todas las tiendas están cerradas, describió la agencia de la ONU.
“La población está muy preocupado por la posibilidad de una mayor violencia en las próximas horas, en particular, por una incursión terrestre. Las personas están limitando sus movimientos tanto como sea posible”, agregó.
La víspera, la mayoría de las instituciones del gobierno cerró, excepto los servicios médicos.
Además han tenido lugar desplazamientos limitados con un pequeño número de habitantes de Gaza que buscaron refugio en las instalaciones de las escuelas de UNRWA durante la noche, “ya que esto les dio una mayor sensación de seguridad”. La agencia precisó que todavía no se han abierto los refugios de emergencia.
UNRWA es una agencia de las Naciones Unidas establecida por la Asamblea General en 1949 y tiene el mandato de prestar asistencia y protección a una población de unos cinco millones de refugiados palestinos registrados.
Su misión es ayudar a los refugiados de Palestina en Jordania, Líbano, Siria, Cisjordania y la franja de Gaza para que puedan alcanzar el máximo potencial en su desarrollo humano, en espera de una solución justa a su difícil situación.