ofensiva aérea cerca del monte Sinjar, en el noroeste.
"El ataque al suroeste de Bagdad fue el primero de los bombardeos iniciados para expandir nuestros esfuerzos en la protección de nuestros ciudadanos y las misiones humanitarias contra el ISIS, mientras las fuerzas iraquíes prosiguen con su ofensiva", señala un comunicado del Comando Central de EE.UU.
"En total, fueron destruidos seis vehículos del ISIS cerca de Sinjar y una posición de ataque yihadista al suroeste de Bagdad que estaba disparando contra personal de las fuerzas internas de seguridad (ISF). Todos nuestros aviones de combate abandonaron las áreas intactos", agrega.
El gobierno de Barack Obama inició los bombardeos selectivos contra blancos yihadistas en Irak a principios de agosto, siempre para dar soporte a las tropas iraquíes. Durante la ofensiva, se atacó principalmente la zona de Mosul, donde funciona una represa que es vital para la economía y el suministro del país, y la ciudad de Erbil, para proteger intereses estadounidenses y a la población civil.
Los ataques fueron reanudados cuando hay expectativa por la incursión de Estados Unidos en Siria, luego de que Obama anunció que atacaría también blancos terroristas en ese país, gobernado por el dictador Bashar Al Assad.
De momento, al menos 30 países participarán en la coalición internacional propuesta por EEUU para dar batalla a los terroristas islámicos, que han fundado un califato en Irak y Siria y planean expandirse a más países de Medio Oriente.
Mientras continúa la ofensiva, el ISIS amenaza con seguir decapitando rehenes en señal de advertencia para EEUU y el resto de las potencias occidentales. Ya asesinaron a los periodistas estadounidenses James Foley y Steven Sotloff, así como al británico David Haines. El próximo en su macabra lista es Alan Henning.