20 por ciento del total de jóvenes que viven en la región, los que sumaban en 2012 cerca de 108 millones de personas.
La mayor tasa de jóvenes que no estudian ni trabajan se encuentra en Honduras, con un 28.7 por ciento del total nacional de jóvenes, seguido de El Salvador (23.9 por ciento), Colombia (22.7), Guatemala (22.6), México (20.8) y República Dominicana (20.6).
Uno de cada 20 jóvenes que vive en la región no estudia, no trabaja, no desempeña quehaceres en el hogar ni tampoco busca trabajo, grupo que se encuentra en una condición de “alto riesgo social”, precisó.
De los 108 millones de jóvenes de entre 15 y 24 años de edad que viven en la región, el 55 por ciento se encuentra trabajando, pero la mayoría (57 por ciento) sin un contrato laboral formal y, por ende, sin cobertura social.
De acuerdo con las estadísticas entregadas este miércoles por la OIT, del total de jóvenes que no estudian ni trabajan, el 70 por ciento son mujeres que se dedican a realizar quehaceres domésticos.
En materia de empleo, seis de cada 10 empleos para los jóvenes se encuentran en el sector informal de la economía, por lo que se trata de trabajos precarios y de baja productividad.
Los sectores donde se concentran los trabajos donde se desempeñan los jóvenes son comercio (29.1 por ciento), servicios (20.9 por ciento) e industria (14.3 por ciento).
Según cifras de la OIT divulgadas en el marco de su 18 Reunión Regional Americana, que concluye este jueves en Lima, el desempleo de los jóvenes de entre 14 y 24 años se redujo en la región desde un 16.4 por ciento en 2005 a un 13.3 por ciento en 2012.
Sin embargo, puntualizó el organismo internacional, “la tasa de desempleo juvenil triplica la del desempleo adulto”.
Del total de jóvenes latinoamericanos y caribeños, un 35 por ciento sólo estudia y un 33 por ciento sólo trabaja, mientras que un 12 por ciento estudia y trabaja al mismo tiempo.