El funcionario, dio un informe en el centro de medios de Río y resaltó la resistencia y la organización con la que se vivió el evento.
“Siempre nos habían señalado por la improvisación, pero demostramos que no es así”, dijo Paes quien aseguró que los habitantes de la capital brasileña se adaptaron a las necesidades de los JO.
“Los carriles confinados para el transporte olímpico fueron muy respetados desde el primer día. La gente fue capaz de entender que no era un lujo, sino una necesidad para facilitar el desplazamiento de las delegaciones olímpicas”, explicó el alcalde.
Del mismo modo, Paes aprovechó la oportunidad para criticar a aquellos personajes que “alarmaron” e hicieron recomendaciones sobre los casos de zika antes de los Juegos.
"No teníamos ningún caso zika. Quiero hacer hincapié en que los sectores de salud alarmistas no lograron que los turistas se espantaran por r los mosquitos", dijo.
También reveló que Río donará una de las piscinas olímpicas utilizadas en los Juegos. "Tres alcaldes de capitales pidieron una de las piscinas de los Juegos Olímpicos, lo cual fue muy enfático. Debido a que el dinero provenía del gobierno federal, no veo por qué no donar", dijo Paes.
En cuanto al turismo, el alcalde de Río estimó que durante los Juegos, 1.17 millones de turistas estuvieron en Rio. Entre ellos, 410,000 extranjeros, mientras que el gasto promedio fue de 424.62 dólares por día. Mientras que el número de turistas nacionales que visitaron la ciudad fue de 760,000.