jubilaciones que será financiado con un ahorro colectivo.
Aunque la presidenta admitió, en una transmisión voluntaria de radio y televisión, que el proyecto no logró convocar un respaldo de todos los sectores políticos, destacó la urgencia de mejorar las pensiones en el corto y mediano plazo.
"Debemos avanzar hacia un sistema previsional realmente mixto, donde todos pongan su parte, donde la solidaridad vaya de la mano del esfuerzo personal, donde el Estado y los empleadores hagan la parte que les corresponda", dijo Bachelet en su discurso.
La reforma al sistema de pensiones, que no incluye un aumento en la edad de las jubilaciones de hombres y mujeres, busca establecer un aporte previsional adicional de 5 por ciento para crear un nuevo esquema de ahorro colectivo, el que será manejado por una entidad pública y autónoma.
El incremento propuesto en la cotización, desde el actual del 10 por ciento, se aplicará con cargo al empleador y su implementación ocurrirá en un periodo de seis años una vez aprobado el proyecto en el Congreso.
"Hoy estamos introduciendo un sistema de ahorro colectivo, que complementa el esfuerzo individual", dijo Bachelet.
La mandataria dijo que los recursos generados con el aumento de 5 por ciento en las cotizaciones se dividirán en dos partes. Un 3 por ciento irá directamente a la cuenta personal de cada trabajador, mientras que el 2 por ciento restante se destinará a un seguro de ahorro colectivo.
"Estos recursos serán administrados con un fuerte carácter redistributivo, para que además de la solidaridad intergeneracional, exista apoyo hacia los que logran un menor ahorro y pensiones más bajas", explicó Bachelet.
El proyecto contempla además que los afiliados tengan una mayor participación en la definición de las políticas de inversión de su fondo de pensiones.