puntos más que el año previo, acercándose una vez más a la mejor práctica internacional que es Nueva Zelandia con una calificación de 86.55 puntos. Con este resultado, México se ubica en la posición 49 entre 190 economías analizadas. Los indicadores en que México mejoró su calificación fueron: apertura de empresas, obtención de permisos de construcción y obtención de electricidad. Se presentó un retroceso en registro público de la propiedad, pago de impuestos y resolución de insolvencia. Se mantuvieron sin cambio: obtención de crédito, protección a inversionistas minoritarios, comercio transfronterizo y cumplimiento de contratos. Con este resultado México mantiene la mejor posición en América Latina, superando a Chile (55), Perú (58), Colombia (59), Costa Rica (61), Argentina (117) y Brasil (125). México superó también a economías de grandes mercados emergentes del G20, incluyendo a Turquía (60), China (78) y Sudáfrica (82), además de países de la Unión Europea, tales como Bélgica (52) y Luxemburgo (63). La economía número uno en el ranking fue Nueva Zelandia, seguida de Singapur, Dinamarca, Corea del Sur y Hong Kong.