Línea de Crédito Flexible (LCF) para México a dos años por 74 mil millones de dólares, con base en una solicitud por un monto menor que hicieron autoridades mexicanas.
La cifra significa una reducción respecto a la línea a dos años por 86 mil millones que el directorio del FMI aprobó a México en noviembre de 2017.
Las autoridades indicaron que los fondos tendrán un carácter precautorio y no se dispondrá de ellos.
La directora gerente del FMI, Christine Lagarde, dijo que la reducción del monto derivó de una nueva valoración de las autoridades mexicanas sobre la postura fuerte del país para hacer frente a choques externos.
“En vista de que algunos de los riesgos que enfrentaba México se han disipado y que el país cuenta con reservas sólidas, las autoridades solicitaron la reducción del acceso en el marco del actual acuerdo, conforme al compromiso asumido en el momento de la aprobación hace un año”, dijo un comunicado.
Lagarde reconoció que México mantiene políticas sólidas que le han permitido sortear las dificultades de un entorno externo complejo, pero con un crecimiento sostenido y menor inflación.
“El gobierno actual y el entrante han expresado su compromiso de mantener políticas y marcos de política sumamente sólidos, incluida la independencia de las instituciones a cargo de las políticas económicas”, señaló.
Consideró que el nuevo acuerdo representa un instrumento importante de apoyo a la estrategia macroeconómica de las autoridades mexicanas de ofrecer un seguro frente a los riesgos extremos y apuntalar la confianza del mercado.
“El acceso más reducido es adecuado y coherente con las estrategias de las autoridades, que contemplan una disminución gradual del uso del servicio por parte de México, siempre que disminuyan los riesgos”, expuso.