“Lo que no podemos tolerar, y nunca aceptaremos es una persona o compañía, que conociendo el peligro no diga nada. Literalmente, el silencio puede matar. Desde noviembre de 2009, GM ha estado recibiendo información sobre los problemas defectuosos ligados al sistema que activa los airbag. Han apilado la información y no han dicho nada a nadie “, ha asegurado el Secretario estadounidense de Transporte, Anthony Foxx.
Como parte del acuerdo de este viernes, GM se compromete a hacer cambios internos significativos en seguridad, y a alcanzar en octubre el volumen de componentes que necesita para sustituir las piezas defectuosas que afecta a cerca de 10 millones de vehículos.
El anuncio llega un día después de que el fabricante de automóviles anunciara una nueva campaña de revisión de casi 3 millones de vehículos en todo el mundo debido a disfunciones en el sistema de iluminación trasero y defectos en los frenos hidráulicos.
Esta nueva llamada a revisión afecta modelos de las marcas Chevrolet, Cadillac, Pontiac, Saturn y GMC.