Exhortan a los ciudadanos y autoridades a hacer conciencia en el cuidado del medio ambiente.
Investigadores del Instituto de Ciencias de la Atmósfera de la UNAM alertaron, en el Senado, de las consecuencias en la salud y la competitividad por la falta de uso de nuevas tecnologías en los automóviles, lo que aumenta la concentración de partículas contaminantes en el aire de la Ciudad de México.
Durante la realización del foro “La voz humana: Educación y cuidados”, la senadora Layda Sansores San Román, exhortó a los ciudadanos y autoridades a hacer conciencia en el cuidado del medio ambiente, ya que sumado a la contaminación atmosférica en la ciudad, las áreas verdes se reducen debido a las construcciones que se autorizan.
La legisladora del Grupo Parlamentario del PT dijo que en la capital del país “vivimos en un caos ambiental en todos sentidos, el mejor antídoto para la contaminación ambiental son funcionarios honestos”, que no permitan la tala masiva de árboles que son los pulmones de la Ciudad de México.
El investigador Arón Jazcilevich Diamant, recomendó a las autoridades de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) aplicar la Norma Oficial Mexicana que dará lugar al uso de nuevas tecnologías y, por ende, la reducción de contaminantes en los automóviles, la cual se espera entre en vigor el próximo año.
Resaltó que datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), revelan que las actuales emisiones de diésel son cancerígenas, no obstante esta normatividad no podrá entrar en vigor si no se cuenta con nuevas tecnologías que permitan utilizar gasolinas de ultra bajo azufre, ya que supone altos costos para los automovilistas.
De no transitar a estas tecnologías, México se quedará rezagado en competitividad en comparación con otros países que han adoptado estas medidas, “para ser competitivos debemos homologarnos a este tipo de normas y se ha tardado mucho en ser implementada”.
Jazcilevich Diamant dijo que se requiere facilitar la entrada al mercado de ésta tecnología, como filtros que reduzcan las emisiones de óxido de nitrógeno, los cuales necesitan de un líquido llamado urea, “requerimos establecer condiciones de mercado para que esté disponible esta solución, además de un filtro de partículas que requieren mantenimiento”.