La caravana donde viajaba la aspirante indígena a la presidencia de México, Marichuy Patricio, ha sido atacada la noche de este domingo, según informan
fuentes cercanas a la candidata. En un breve comunicado informan de que junto a ella se encontraban miembros de su equipo y un grupo de periodistas.
El suceso se ha producido en una carretera de Michoacán, entre Tepalcatepec y Buenavista, en plena Tierra Caliente, uno de los puntos más peligrosos del país. Al parecer, un grupo de hombres armados los detuvo, los amenazó y les robó todo el material de valor que llevaban, como celulares y cámaras de vídeo y fotos.
Alrededor de las 20.00 horas de este domingo el equipo de prensa de Marichuy ha señalado a este diario que la candidata y el grupo que la acompaña se encuentran incomunicados. Desde el Congreso Nacional Indígena han denunciado lo ocurrido y han enviado a un grupo a su encuentro: "Exigimos garantías de seguridad para la caravana y nuestra vocera", manifiestan.
Marichuy se encuentra en plena campaña para recolectar las firmas suficientes que le permitan acercarse a la candidatura por la presidencia de México. Hasta ahora ha registrado 171.000 firmas.
Y aunque tiene como aliados a un grupo de intelectuales mexicanos, incluido Juan Villoro, y a los universitarios, esto no ha sido suficiente para superar las cifras de Jaime Rodríguez, el polémico gobernador de Nuevo León, o la ex primera dama Margarita Zavala. Todavía se encuentra muy lejos del mínimo necesario para poder presentarse a las elecciones del próximo 1 de julio: 866.000. Y le queda poco menos de un mes, la fecha límite para lograrlo es el 19 de febrero.
La aspirante ha sido atacada en pleno esprint final para conseguir el apoyo necesario. Su vehículo fue interceptado en una zona amenazada por las luchas intestinas entre cárteles medianos y grandes capos de la droga, un punto donde hace tres años se levantara un grupo de autodefensas contra la depredación del cartel de Los Caballeros Templarios y dos desde que el Gobierno tuviera que enviar un comisionado para apaciguar la volcánica zona.