Mujeres indígenas Mazahuas, con sus vestidos tradicionales mandaron un mensaje al jefe de Gobierno del Distrito Federal GDF), Miguel Ángel Mancera y al jefe delegacional en Benito Juárez, Jorge Romero Herrera, para que cese la persecución y hostigamiento de lo que son presas, ya que buscan su forma de sobrevivir en el comercio informal.
Durante una entrevista con la líder de comerciantes del primer cuadro de la ciudad y de los Mazahuas, María Rossete, dijo a los radio
escucha del programa de radio “VOCES AL AIRE”, que se tras mire por el 760 de ABC, que cerca 200 miembros de la Asociación de Ambulantes Mazahuas de la Ciudad de México, pide que 70 puestos ambulantes sean reinstalados en las inmediaciones del Eje siete Sur Félix Cuevas y Avenida Universidad.
También se dirigieron al primer mandatario de la Nación, Enrique Peña Nieto, que las apoye en todas las necesidades que carecen en la Ciudad de México.
Son del Estado de México, de Toluca, pero radican en el Centro Histórico como comerciantes ambulantes, venden artesanías en la calle, pero en la delegación política en Benito Juárez, los tratan como si fueran delincuentes, dice María Rossete.
Estas personas solo buscan cómo sobrevivir, que les den un espacio para poder trabajar libremente, y pidió un trabajo para los jóvenes quienes en muchas de las ocasiones son perseguidos, peor que delincuentes.
Los Mazahuas recorren las calles del primer cuadro de la ciudad, porta su traje típico todos los días que ellas mismas elaboran, dicen que está población esta marginada por las autoridades del GDF. Y de las delegaciones política, porque no les permiten trabajar.
María Rossete explica al director general del diario nacional “El Punto Crítico” y quien dirige el programa de radio “VOCES AL AIRE”, Eduardo Ramos Fusther, sobre el comercio informal y dijo que con la reubicación de los ambulantes del Centro en 2008, los indígenas buscaron nuevas las delegaciones como Iztapalapa, Gustavo A. Madero, Venustiano Carranza, Tlalpan, Coyoacán y Cuauhtémoc; esta última es su eje de empleo, debido a que una gran parte de ellos se dedica al comercio informal en lugares como la Alameda Central, la Ciudadela y en calles del Centro Histórico, áreas para trabajar.
No les permitieron incorporarse a ninguna de las plazas comerciales, y eso los hizo establecerse en lugares como la Plaza del Carmen, Plaza del Estudiante; también hay algunos en puentes subterráneos de calzada de Tlalpan; pero en comparación de la demanda, son mínimos los espacios que tienen para trabajar, lo cual provoca que deambulen en distintas calles”, dijo.
Pidió aceptar que ese es un pendiente para atender a esta población, no tienen un espacio bien enfocado a que puedan vender sus artesanías, bueno, sí hay, pero son muy pocos, no alcanzarían.
La líder de los comerciantes del primer cuadro de la ciudad señaló que los Mazahuas hacen los trabajos “más bajos” y aún viven un periodo de discriminación que no los deja integrarse completamente al resto de los capitalinos.
“Cargadores, venden chicles, lo más humilde lo hacen ellos. Hay mucha discriminación todavía, se nota en todo, en que ellos tienen que vivir separados, como si estuvieran en comunidad, se vienen a aquí y se vienen al mismo terreno todos juntos”, señaló.
De acuerdo a la Dirección de Equidad de los Pueblos y Comunidades de la Secretaría de Desarrollo Rural y Equidad para las Comunidades, señaló que más de 500 mil personas en el DF pertenecen a una comunidad indígenas.
De las 68 agrupaciones que hay en el país, 55 se ubican en la ciudad, esto es poco más del 80 por ciento. De esta población podríamos decir que son 123 mil 224 hablantes de lenguas indígenas, 58 mil 59 hombres y 65 mil 165 mujeres.
Las lenguas que más se hablan en la capital mexicana son la náhuatl, mixteco, otomí y mazateca.