En entrevista para el programa El Punto Crítico que se transmite por Radio Fórmula, por el 14.70 de AM, la diputada local Miriam Saldaña Cháirez, destacó la pasividad del mercado como consecuencia de la falta de movilidad en el desarrollo inmobiliario.
La presidenta de la Comisión de Vivienda explicó al conductor del espacio radiofónico, Eduardo Ramos Fusther, que el impacto económico en el DF es de aproximadamente 30 mil millones de pesos, que se traduce en 40 mil viviendas no construidas.
La legisladora detalló que la inversión de las inmobiliarias está detenida en el DF, debido a un vacío legal y, por consecuencia, las obras y proyectos de construcción han caído 50%, con lo que se agudiza el rezago en la edificación y entrega de miles de viviendas.
Como salida a esta situación de caos, la legisladora afirmó que la iniciativa de Ley de Vivienda propuesta recientemente ante el pleno de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal, resuelve y atiende de manera sustancial, con visión robusta y de futuro, las necesidades del sector, a fin de no dejar lagunas que permitan los malos manejos o interpretaciones erróneas que terminen en actos de corrupción o de falta de transparencia.
A manera de ejemplificar la situación real, refirió Saldaña Cháirez que el aplazamiento en la materia es de 115 mil casas, aproximadamente, las que se dividen en 55 mil 410 de viviendas nuevas y 58 mil 916 de mejoramiento.
La demanda de vivienda que concentra 49.13%, está en la población con menos de ocho salarios mínimos mensuales, de los cuales sólo 46.2% es atendido por el Instituto de Vivienda del Distrito Federal. Lo anterior trae como consecuencia que sean expulsadas de la ciudad alrededor de un millón de familias, subrayó la diputada.
Con el proyecto de Ley de Vivienda se busca revertir los números, y ofrecer a la población de mayor vulnerabilidad las oportunidades de habitar en un lugar digno, que responda a sus necesidades prioritarias, de ahí la imperiosa necesidad que la iniciativa sea discutida y aprobada en el presente periodo ordinario de sesiones.
La intención es que, en 2015, en el Distrito Federal arranque una etapa de esplendor y transparencia en la construcción y entrega de vivienda, con respeto al medio ambiente y en condiciones de habitabilidad suficientes, dejando de lado la corrupción que empaña a la industria, concluyó.