Ante la conclusión de la Auditoría Superior de la Federación (ASF) sobre la gestión ineficiente y poco transparente de la delegación Benito Juárez en la aplicación de los recursos del FOPEDEP, la diputada Dinorah Pizano Osorio solicitó a la Contraloría General del Distrito Federal, investigue las responsabilidades en las que hayan incurrido los servidores públicos de la demarcación.
El Fondo de Pavimentación, Espacios Deportivos, Alumbrado Público y Rehabilitación de Infraestructura Educativa para Municipios y Demarcaciones Territoriales del Distrito Federal (FOPEDEP), otorgó para la demarcación un monto de 118 millones de pesos, de los cuales más del 50 por ciento se utilizó en obras distintas a las establecidas, explicó la legisladora perredista.
En el informe de la evaluación de control interno, destacó la observación sobre la falta de informes periódicos de la situación en la que se encuentra la delegación, ni con procesos sustantivos que dé soporte al cumplimiento de los objetivos y metas del programa de desarrollo delegacional. Además, dijo Pizano Osorio, tampoco se cuenta con el procedimiento para la asignación de responsabilidades sobre la mitigación y administración de riesgos, ni con procedimientos para la autorización de planes y programas de administración de riesgos.
Según el informe de la ASF, la delegación Benito Juárez destinó 65 millones de pesos en rubros que no se consideran en las disposiciones del fondo, en adquisiciones de materiales de construcción que no se acreditó que correspondieran a obras ejecutadas por administración directa, y sin evidencia de su autorización por parte del Gobierno del Distrito Federal.
Por lo anterior, se realizó una búsqueda de los informes realizados respecto a las obras ejercidas, sin encontrar ninguna publicación en su página de Internet ni en otro medio de difusión local, ni información referente a las obras que se ejercieron con el recurso del FOPEDEP 2013, así como el cumplimiento de los programas y proyectos ejecutados con el fondo, afirmó la legisladora.
Añadió que tampoco presentaron evidencia de que la publicidad y documentación del fondo incluyera la leyenda “este programa es público, ajeno a cualquier partido político. Queda prohibido el uso para fines distintos a los establecidos en el programa”.
Cinco delegaciones desvían 15.9 mdp del fondo federal
No sólo la delegación Benito Juárez desvió fondos federales, también lo hicieron en Álvaro Obregón, Gustavo A. Madero, Iztapalapa, Miguel Hidalgo y Venustiano Carranza.
De acuerdo a la Auditoría Superior de la Federación (ASF), estas cinco delegaciones dañaron o perjudicaron a la Hacienda Pública Federal por un monto de 15 millones 923 mil 133 pesos. A través del Informe de Resultados de la Fiscalización Superior de la Cuenta Pública 2013, entregado a la Cámara de Diputados, se detalla que las jefaturas delegacionales no ejercieron de forma correcta los recursos del Fondo de Pavimentación, Espacios Deportivos, Alumbrado Público y Rehabilitación de Infraestructura Educativa para Municipios y Demarcaciones Territoriales del Distrito Federal (Fopedep).
A la delegación Miguel Hidalgo le asignaron de este fondo 41 millones 250 mil pesos, es aquí en donde se presenta el caso más grave de desvío, pues no comprometió 424 mil 960 pesos, además, tuvo retenciones pendientes de enterar a las instancias correspondientes por 786 mil 518 pesos. De igual forma, pagó cuatro millones 251 mil 667 pesos por una obra estimada no considerada en el catálogo autorizado, y dio un millón 733 mil 387 pesos por volúmenes de obra estimados y pagados con precios superiores a los contratados.
Por si fuera poco, erogó por obras no ejecutados 101 mil 918 pesos, y 31 mil 424 pesos por exceder el dos por ciento para gastos indirectos del costo de una obra. Álvaro Obregón obtuvo 40 millones de pesos del Fondo, pero, según el informe, pagó una obra que no se ejecutó con este recurso, “se presume un probable daño o perjuicio o ambos a la Hacienda Pública Federal por un monto de 406 mil 713 pesos más los intereses generados desde su disposición hasta su reintegro a la cuenta bancaria de la Tesorería de la Federación, por conceptos de obra pagados no ejecutados en una obra realizada”.
A la delegación Gustavo A. Madero se le asignaron recursos por 53 millones 496 mil pesos, sin embargo, destinó dos millones 846 mil 693 pesos a una obra de rehabilitación y mantenimiento de espacios públicos, que no se encuentra considerada en el Fondo. Además, erogó 67 mil 900 pesos para una supervisión de obra que no corresponde a las pagadas con recursos del Fopedep.
De igual forma, destinó 678 mil 714 pesos para pagar conceptos de obra no ejecutados y 244 mil 519 pesos por luminarias que no se encontraban funcionando que fueron reparadas o adquiridas con recurso federal. A Iztapalapa le tocaron 73 millones 500 mil pesos. La ASF detectó que la delegación no comprobó un pago por dos millones 756 mil 834 pesos, además de que pagó 907 mil 099 pesos por una obra que no se encontró físicamente.
La delegación Venustiano Carranza recibió de este fondo 53 millones de pesos. Se detectó un daño o prejuicio a la Hacienda Pública Federal por un monto de 239 mil 912 pesos, recurso que no fue devuelto al gobierno federal, además de 178 mil 762 pesos por concepto de penalizaciones, las cuales no se han reintegrado a la Tesorería de la Federación. Por si fuera poco, la ASF detectó que la delegación realizó un pago por 266 mil 113 por concepto de “Servicios de Director Responsable de obra”, mismo que no está justificado.