Un documento fue dado a firmar a los reporteros que cubrirán las actividades proselitistas del abanderado perredista al gobierno estatal, Silvano Aureoles Conejo, el cual representa deslinde de toda responsabilidad penal, moral o civil, para los
encargados de la campaña y para el propio candidato, en caso de cualquier incidente o accidente.
Cabe señalar que ayer domingo, previo a salir el pull de prensa de periodistas y camarógrafos que cubrirán al candidato perredista, Fernando Arredondo López –quien estarán encargado de los medios de comunicación en las giras de Aureoles-, entregó el referido documento a los comunicadores para que lo signaran.
El texto a firmar señala: “Por medio de la presente deslindo de toda responsabilidad penal, moral o civil, a los encargados y al candidato mismo de cualquier incidente o accidente que pudiese pasar en el transcurso de mi viaje, estancia y/o participación, para cubrir las incidencias de estas campañas”.
Asimismo hay un apartado en donde a los comunicadores hacen del conocimiento de los encargados de la campaña datos personales como enfermedades, si toman medicamentos, su domicilio, etcétera.
Una narración de hechos, dada a conocer a este medio la cual se transcribe a continuación:
El jueves 29 de septiembre de 2011, el entonces candidato del PRD PT al gobierno de Michoacán Silvano Aureoles, había tenido actividades de campaña por la tierra caliente y costa de Michoacán.
El pull de prensa que cubría al candidato viajaba de regreso por la noche en dos camionetas que usaban para trasladar a reporteros y camarógrafos.
Los vehículos se desplazaban en la carretera de Buena Vista Tomatlán – Apatzingán, algunos comunicadores venían platicando, otros dormían por el cansancio de la jornada.
En cierto momento un conductor que manejaba en sentido opuesto invadió el carril contrario y chocó contra la unidad donde viajaban los periodistas, ambos vehículos se incendiaron.
El conductor que ocasionó el accidente José Wilberth Camacho Álvarez, originario de Apatzingán murió por el impacto.
Una reportera de TV Azteca Michoacán que cubría la campaña recuerda que la segunda camioneta en que viajaba ella no alcanzó a evitar el choque y también chocó por alcance para después salir de la carretera.
Esta reportera fue de los 7 periodistas heridos, “sus heridas fueron menores -dijo un reporte posterior de la televisora- pero nadie las atendió”.
Y es que efectivamente ni el candidato Silvano Aureoles, ni el PRD o PT y mucho menos el equipo de prensa del entonces candidato se hizo responsable de las heridas de esta comunicadora ni de los reporteros de otros medios que estuvieron en ese accidente.
Otra reportera dijo: “tengo dos fracturas en la parte externa de la muñeca”.
Ella fue afortunada, pero dos comunicadores en especial, no lo fueron tanto.
Jaime Márquez, reportero, sufrió heridas múltiples a causa de este accidente que lo mantuvieron hospitalizado y al borde de la muerte por varias semanas. El perdió una pierna como consecuencia del accidente y hoy a 3 años de distancia ya aprendió a caminar con la prótesis que le pusieron y que lo acompañará de por vida.
Arturo Cano, productor y camarógrafo, iba en la parte posterior de la camioneta que chocó de frente con el conductor que invadió el carril y que además fue impactada por detrás también por la otra camioneta donde viajaban más periodistas.
Fue al último que rescataron sus compañeros porque además estaba inconsciente, la camioneta ya estaba en llamas y tuvieron que jalarlo pese a que estaba visiblemente fracturado de la cadera y con una lesión en la columna.
Desde entonces Arturo Cano inició un camino a la recuperación que desde ese día lo mantiene atado a una silla de ruedas, tiene una lesión cervical que lo dejó invalido de por vida.
El reportaje de TV Azteca sobre el accidente dijo en ese momento que nadie se hizo cargo de los heridos.
Lo peor de todo, Jaime Márquez y Arturo Cano, no iban de parte de ningún medio, eran del equipo de prensa del candidato Silvano Aureoles, tampoco para ellos hubo apoyo.
Dos visitas a los hospitales donde estaban internados, eso sí con su respectiva foto y promesas de apoyo, fue todo lo que ambos comunicadores recibieron del ahora diputado federal con licencia y nuevamente candidato a gobernador Silvano Aureoles.
Sus familias y amigos los ayudaron a salir adelante, tuvieron diversos apoyos de personas e instituciones de quienes tal vez ni esperaban nada, pero de su candidato, posteriormente presidente de la cámara de diputados y del partido que los contrató para cubrir la campaña, nada, reitero, nada.
Tal vez por eso causó enojo, indignación o al menos incredulidad a los reporteros que fueron a cubrir el primer día de la nueva campaña de Silvano Aureoles, que les dieron a firmar una carta responsiva en la que deslindaban al candidato de todo accidente que pudiera ocurrir durante la cobertura de la campaña.
La carta dice en su primer párrafo: “por medio de la presente deslindo de toda responsabilidad penal, moral o civil a los encargados y al candidato mismo de cualquier incidente o accidente que pudiese pasar en el transcurso de mi viaje, estancia y/o participación para cubrir las incidencias de esta campaña”
Posteriormente los responsables de la carta quisieron aclarar que la intención era recabar los datos personales de los comunicadores para poder “atenderlos mejor en caso de alguna emergencia”
Si ese era el caso entonces no se hubieran tomado la molestia de pedir deslindar de toda responsabilidad moral “al candidato mismo” ya que, después de todo, él mismo se deslindó de toda responsabilidad moral desde hace tres años.