El presidente de EU, Donald Trump, anunció que va a comenzar a renegociar pronto con los líderes de México y Canadá el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN o NAFTA), firmado por los tres países hace dos décadas. La renegociación del NAFTA fue una de las promesas de Trump durante la campaña electoral.
En un acto en la Casa Blanca en el que juraron sus cargos varios altos funcionarios nombrados por Trump, el presidente confirmó su intención de renegociar el NAFTA con el mandatario mexicano, Enrique Peña Nieto, al que recibirá el 31 de enero, y con el primer ministro canadiense, Justin Trudeau, con quien también prevé reunirse pronto.
El NAFTA fue firmado hace 20 años por los entonces presidentes de Canadá, México y Estados Unidos, y Trump culpa a ese acuerdo de la pérdida de empleos y del cierre de empresas que se desplazan a los países vecinos para abaratar costes.
"Vamos a empezar las negociaciones que tienen que ver con el NAFTA", dijo Trump sobre su próxima reunión con Peña Nieto, con el que agregó que también hablará de "inmigración" y de "seguridad en la frontera".
Este sábado el portavoz de la Casa Blanca, Sean Spicer, adelantó que Peña Nieto, a quien calificó erróneamente de "primer ministro", visitará la Casa Blanca para reunirse con Trump el 31 de enero.
En esa visita los dos líderes hablarán de "comercio, inmigración y seguridad", según dijo el nuevo portavoz de la Casa Blanca.
La Presidencia de México informó en un comunicado de que este sábado Peña Nieto habló por teléfono con Trump, a quien felicitó por su toma de posesión y expresó la voluntad de "trabajar en una agenda que beneficie a ambos países".
Una de las promesas de la campaña de Trump fue la construcción de un muro en la frontera con México para frenar la inmigración ilegal hacia Estados Unidos.
Según el magnate y ahora nuevo presidente de Estados Unidos, ese muro será pagado por México.
Spicer explicó que Trump también habló este sábado por teléfono con Trudeau, con quien mantuvo una conversación "constructiva" en la que ambos acordaron fijar un encuentro durante los próximos días.
Trump, se centrará en su primera semana en el cargo en trabajar sobre comercio, inmigración y seguridad nacional, asuntos sobre los que es posible que emita órdenes ejecutivas en los próximos días, adelantó su jefe de gabinete, Reince Priebus.
En una entrevista con la cadena Fox, Priebus dijo que habrá "movimiento" sobre esos tres asuntos en esta semana.
Trump ha prometido sacar a EEUU del Acuerdo de Asociación Transpacífico (TPP), del que forman parte otros 11 países, y renegociar el NAFTA, un acuerdo comercial con México y Canadá.
En cuanto a los inmigrantes, tras ganar las elecciones del 8 de noviembre Trump dijo que expulsaría a los que tienen "antecedentes penales", cerca de tres millones, en vez de al total de 11 millones de indocumentados a los que prometió deportar durante la campaña.
El ya expresidente Barack Obama pidió personalmente a Trump que proteja a los llamados "dreamers" ("soñadores"), jóvenes indocumentados que llegaron al país de niños y se han beneficiado de un programa de alivio migratorio (DACA) que él lanzó mediante una orden ejecutiva en 2012.
Trump firmó el mismo viernes, pocas horas después de su investidura, una orden ejecutiva contra la reforma sanitaria de su antecesor, popularizada por sus detractores con el nombre de Obamacare.
El nuevo presidente instruyó a las agencias del Gobierno a "aliviar las cargas del Obamacare", lo que supone darles carta blanca para desoír las directivas de la reforma sanitaria mientras el Congreso la deroga y sustituye por un nuevo plan.
Por otro lado, Kellyanne Conway, consejera del presidente, dejó claro que Trump no piensa divulgar sus declaraciones de impuestos.
Conway comentó a la cadena ABC que ese tema se discutió durante toda la campaña electoral y que a la gente "no le importa" la declaración de impuestos de Trump.
La asesora de Trump respondió así a una petición colgada en la web de la Casa Blanca para que Trump dé a conocer sus declaraciones de impuestos y que ha superado las 100 mil firmas, el umbral necesario para que el Gobierno se pronuncie al respecto.
Una encuesta reciente de la cadena ABC y el diario The Washington Post reveló que tres cuartas partes de los estadounidenses creen que Trump debería divulgar la información sobre sus impuestos.